El Ayuntamiento contratará, en poco más de un año, el suministro de energía eléctrica cien por cien procedente de fuentes renovables. Con ese objetivo elaborará el nuevo contrato al cual sólo podrán acceder aquellas empresas que acrediten que sólo comercializan con energías verdes. El ayuntamiento sigue así los pasos del Ayuntamiento de Madrid, gobernado por Manuela Carmena, que también exige a su compañía de la luz que la energía que suministra sea limpia.

El Govern de la Nau se ha visto obligado a redactar un nuevo pliego de condiciones para contratar el suministro eléctrico tras anular el Tribunal de Recursos Contractuales el anterior pliego que incluía una clausula contra la pobreza energética que obligada a la empresa suministradora a notificar al ayuntamiento los cortes de luz por impago para comprobar que no afectan a familias vulnerables o en situación de pobreza energética. Endesa y Gas Natural presentaron un recurso contra esta cláusula y el tribunal les dio la razón haciendo notar que este tipo de clausulas sociales no forman parte del objeto del contrato y no son exigibles como mejora. El concejal de Gobierno Interior, Sergi Campillo, apuntó que el ayuntamiento no renuncia a aplicar medidas contra la pobreza energética si bien no se podrán incluir en el contrato eléctrico.

Campillo saco ayer pecho del ahorro en la factura de la luz de los últimos años, con un importe que ha pasado de 25 millones de euros en 2010 a poco más de 15 el año pasado. Entre 2014 y 2017 el ayuntamiento ha ahorrado 4,6 millones de euros.

Mientras se termina de elaborar el nuevo pliego de condiciones, el ayuntamiento firmará un contrato «puente» de un año con la empresa comercializadora Gas Natural Servicios, que ofrece el certificado de garantía de origen, acreditado por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia «y que también mejora los precios actuales, lo cual supondrá para el Ayuntamiento de València un ahorro anual de aproximadamente 164.000 euros respecto al contrato actual».

Este contrato que será aprobado de manera inminente por la Junta de Gobierno está basado en el acuerdo marco de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) con la mencionada empresa adjudicataria y tiene un importe anual de 16,7 millones de euros para los, aproximadamente 1.600 puntos de suministro que actualmente tiene contratados el Ayuntamiento.

Campillo aprovechó la presentación del nuevo contrato para cargar contra el Gobierno central por desincentivar la producción de energías limpias. «Apoyamos a todas las empresas que han manifestado su compromiso con la lucha contra el cambio climático, así como a las energías renovables, tan maltratadas por el gobierno central, destacó el edil.

El nuevo contrato eléctrico de València se dividirá en cuatro lotes e incluirá el alumbrado de la vía pública y los pasos inferiores, los semáforos, fuentes y parques; los colegios públicos; las oficinas municipales y las dependencias de la policía y los bomberos; los cementerios; los edificios de servicios sociales; los mercados municipales; los centros culturales y museos y las depuradoras.