La logia renacentista de la Catedral, la galería exterior con arcadas de tres alturas situada al lado de la Puerta de los Apóstoles y visible desde la plaza de la Virgen, amenaza ruina y ha sido necesario apuntalar los forjados de madera, con problemas de termitas, y poner lonas de protección en los arcos de piedra para evitar desprendimientos. El Cabildo de la Catedral espera desde hace meses el permiso de la Dirección General de Patrimonio para llevar a cabo la restauración de esta galería, conocida como Logia de los Canónigos u «obra nueva», uno de los pocos ejemplos de arquitectura renacentista de la ciudad, según explica el arquitecto y restaurador de la Seo, Salvador Vila.
Esta intervención, asegura el arquitecto, es urgente porque hay riesgo de desprendimiento y caída de casquetes a la vía pública. Este proyecto será uno de los que se abordarán en la reunión a la que la dirección de Cultura y Patrimonio ha convocado al responsable de Patrimonio del Cabildo, Jaime Sancho, y a Salvador Vila, tras publicar este diario la demora en varios proyectos importantes de la Catedral.
Fuentes de la Dirección General de Patrimonio, con Carmen Amoraga al frente, explicaron que se ha convocado a los responsables de la Catedral «para tratar los últimos proyectos que se han presentado y que están pendientes de resolución». En la actualidad están en estudio por parte de los técnicos de dicha dirección general tres proyectos de la Catedral de Valencia. «Son proyectos complejos que requieren de un estudio y valoración en profundidad», añaden las mismas fuentes. Se trata, del proyecto de restauración de la logia, el proyecto de restauración del acceso y salas intermedias del Miguelete y el proyecto de recuperación de la fachada exterior gótica de la girola recayente a la plaza de la Almoina, así como la restauración de la escalera del Archivo.
La Logia de los Canónigos, obra del maestro cantero Miguel Porcar, es una de las primeras y escasas piezas de la arquitectura renacentista valenciana. Se construyó a mediados del siglo XVI con el fin de ocultar la arquitectura gótica de la Catedral, que paradójicamente ahora se trata de recuperar. Esta galería con arcos de trazado curvo transformó radicalmente la configuración arquitectónica de la cabecera de la Seo.
La Dirección General de Patrimonio destacó ayer que aunque en estos momentos hay cuatro proyectos de la Catedral pendientes de resolución (en algunos casos desde hace casi dos años), este monumento es uno de los que más atención recibe por parte de la conselleria. En los últimos seis años se han tramitado, de hecho, una decena de intervenciones de calado en la Seo, un monumento que cada año visitan 300.000 personas.
La conselleria autorizó en 2012 la restauración de la capilla de San Pedro; la restauración de la veleta del Miguelete o Micalet; el proyecto del nuevo Museo Catedralicio y la restauración de las pinturas murales. En 2013, se dio luz verde a la intervención en el acceso de la Capilla del Santo Cáliz y las capillas laterales y a la restauración de la barroca Puerta de los Hierros. Dos años después, en 2015, se autorizó la anexión de la capilla de Santo Tomás de Villanueva al espacio del museo, incluyendo la capilla y el tramo de la fachada entre el museo y la puerta románica de la Catedral. El año pasado se aprobaron el proyecto de restauración del pasadizo elevado que comunica la Catedral con el Palacio Arzobispal, una intervención que ha concluido recientemente; y la restauración de la Capilla del Santo Cáliz; así como el proyecto de iluminación de la misma, financiado por Iberdrola.
