H. G., Valencia

El Ayuntamiento de Valencia seguirá adelante con el desarrollo del plan especial (Pepri) del Cabanyal a pesar del auto judicial que ha paralizado los derribos fuera de la zona BIC (Bien de Interés Cultural), donde ya se suspendieron los derribos en mayo pasado. Así lo anunció ayer el primer teniente de alcalde Alfonso Grau al término de la Junta de Gobierno. Aumsa «seguirá adelante con las actuaciones», destacó Grau quien desafiando a los vecinos de Salvem el Cabanyal aseguró que «tendrán que recurrir una a una las licencias de derribo». Grau acusó a Salvem y a quienes le apoyan de «mentir para intentar retrasar la ejecución del plan». El concejal dijo que la plataforma vecinal «ha dicho que sólo se oponen a la prolongación de Blasco Ibáñez y que les parece bien el resto del plan», pero los derribos paralizados «se encuentran fuera de la zona BIC y no tienen nada que ver con la prolongación».

Grau, quien dijo que la semana próxima se celebrará la reunión de la sociedad Cabanyal 2010, creada por el ayuntamiento y el Ivvsa para el desarrollo del Pepri, ratificó que el ayuntamiento recurrirá el auto del juzgado número 2 de Valencia que ha suspendido cautelarmente los derribos del futuro bulevar San Pedro.

En la Junta se aprobó un gasto plurianual de 3 millones para el retén de policía del Molí del Sol, en el Parque de Cabecera, que este año recibirá 6.000 euros para proyectos. Se aprobó la construcción de la canalización del manantial de la Alameda al futuro balneario de la Lactancia y se dio visto bueno al proyecto de ajardinamiento en el antiguo Hospital del Padre Jofre.