El hogar es uno de nuestros bienes más preciados. Por eso, si se es propietario de una vivienda, es aconsejable contar con un buen seguro de hogar para hacer frente a los imprevistos salvaguardando así, tanto nuestra casa, como los bienes que en ella se encuentren. Y es que de nuestra vivienda depende buena parte de nuestro confort, por lo que es recomendable tener una buena cobertura que solvente, rápidamente, cualquier incidente que ocurra en casa.

Aunque en España no es obligatorio contratar un seguro de hogar, un 75% de viviendas tienen contratado este servicio. Solamente es obligatorio en los pisos hipotecados, puesto que al existir una hipoteca, la entidad bancaria pide al propietario un seguro de hogar capaz de proteger, como mínimo, la estructura de la vivienda. 

Sin una cobertura adecuada del seguro de hogar, cualquier accidente puede suponer importantes consecuencias tanto para nuestro bolsillo como para nuestro bienestar. Sin ir más lejos, el coste de reparar una incidencia leve como una humedad causada por una gotera o fuga, puede superar los 600 euros sin tener en cuenta los desperfectos causados en mobiliario y en terceros.

Una buena cobertura del seguro del hogar permite vivir tranquilo en casa y sin sobresaltos

Los imprevistos más comunes

En España, los hogares asegurados comunican casi dos millones y medio de goteras al año. Es decir, cuatro goteras por minuto, según datos de “Estamos Seguros”, plataforma de información sobre seguros para todos los públicos. Los daños por agua son los accidentes domésticos que más se reportan a las aseguradoras. En concreto, un 41,2% de los incidentes en el hogar corresponden a este tipo de daños, pero no es el único. 

Una mesa de cristal, una ventana, una puerta… Si nunca se te ha roto un cristal en casa, estás de suerte. Y es que, en España, los seguros de hogar reciben un aviso por rotura de cristal cada 26 segundos. 1,2 millones de cristales rotos al año que convierten a este accidente en el segundo más habitual en los hogares. Sin olvidarnos de los daños eléctricos y los desperfectos causados por situaciones climáticas adversas, como la lluvia fuerte o el granizo, los robos y los incendios... No en vano, los seguros resuelven más de 15.000 avisos en hogares a diario según datos del mismo informe, que, al cabo del año, se traducen en cerca de 7,5 millones de incidentes por solventar.

Accidentes en casa… Y en casa de los vecinos

¿Imaginas levantarte una mañana y ver que sale agua por debajo de la puerta del baño? Es lo que le pasó a Marta. Tiene 35 años y vive desde hace dos años en un piso de Barcelona con su pareja. Se levantó una mañana de febrero y, al acercarse al baño, vio que salía agua por debajo de la puerta. Entró en el baño, miró hacia el techo y descubrió que caía agua del techo, probablemente a causa de una fuga de agua en casa del vecino de arriba. El techo estaba desconchado, y los muebles del lavamanos y la puerta se habían hinchado a causa del agua. 

Tras secar lo que pudo con toallas y con la ayuda de una fregona, decidió llamar a su seguro de hogar para explicar lo sucedido y solucionar la avería. En la llamada tomaron nota de lo ocurrido, identificaron las posibles causas del accidente y pudo describir los daños causados tanto en la estructura de la vivienda, que técnicamente en los seguros de hogar se conoce como continente, como en sus bienes personales, a lo que se denomina contenido. La asesora de su compañía le recordó que en su seguro de hogar tiene contratada la garantía de daños por agua que amplía la cobertura del seguro de hogar en caso de accidentes como este, así como la garantía de defensa por reclamación. Dos servicios adicionales que, sin duda, aliviaron las preocupaciones de Marta. 

A partir de la gestión de la aseguradora, se avisó a Alberto, su vecino que, afortunadamente, también tenía contratado un seguro de hogar. Su aseguradora se hizo cargo de los daños, solucionando primero la filtración de agua para poder reparar posteriormente los desperfectos derivados de esta avería. Tras la reparación en casa de Alberto, Marta pudo comenzar a poner fin a los desperfectos que la fuga de agua había causado en su hogar. Un perito de la compañía se acercó a su casa y evaluó los daños causados. Pocos días después, Marta recibió un presupuesto de indemnización de la compañía aseguradora de Alberto para cubrir tanto los desperfectos en el techo como el mobiliario del baño y la puerta. Tras aceptar el presupuesto, Marta pudo arreglar el techo y sustituir los muebles dañados en un par de meses. 

Gracias a la rápida actuación del seguro, la fuga de agua quedó en un accidente que pudo ser revertido y los desperfectos quedaron arreglados sin más dilación. Afortunadamente, Marta contaba con un seguro de hogar que se encargó de las gestiones necesarias, incluyendo la coordinación con la aseguradora del vecino, en este caso imprescindible. 

La historia de Marta ejemplifica uno de los incidentes que más ocurren en los hogares de nuestro país. El seguro de hogar cubre los daños que los incidentes originados en casa puedan causar a terceros, a nuestros vecinos o viandantes gracias a la cobertura de responsabilidad civil. Fue gracias a ella, que su aseguradora protegió a Alberto de los daños ocasionados a Marta que generó la fuga originada en su baño. 

Tener un buen seguro de hogar y estar seguro de tener cubiertos todos estos incidentes es de suma importancia para evitar imprevistos

¿Qué pasa con nuestros bienes materiales?

La cobertura del contenido es la encargada de proteger nuestros bienes materiales, aquellos que no forman parte de la estructura de la vivienda y que están cubiertos en caso de un siniestro o robo. 

Si tenemos objetos de valor, como joyas, es aconsejable incluir una cobertura específica en el seguro del hogar para que, en caso de sustracción, nos devuelvan el valor de lo que nos han robado. Además, gran parte de los seguros también cubre los robos o atracos que los asegurados y las personas que viven en el domicilio asegurado sufran fuera de casa.

¿Has tenido la mala suerte de sufrir un atraco en la calle? Esto es lo que le pasó al hijo de Álex, un caso habitual que nos permite contarte cómo funcionan este tipo de coberturas del seguro de hogar. Álex tiene 40 años y vive en Valencia con su hijo, al que atracaron por la calle en el mes de abril. Le robaron el móvil, dinero en efectivo y las zapatillas deportivas que llevaba puestas. Pocas horas después presentó una denuncia ante la policía y notificó lo sucedido a su aseguradora. Como Álex tiene un capital asegurado de 1.000 euros con su póliza de hogar para atraco, un día después él y su hijo recibieron la visita del perito de su compañía. Tras cuatro días de evaluación, les indemnizaron por el valor de lo que les habían robado, que ascendía a 520 euros. Al haber una denuncia que constata los hechos, este tipo de incidentes se resuelven especialmente rápido. 

¿Qué tipos de seguro de hogar existen?

Si tenemos la intención de contratar un seguro para nuestro hogar, debemos saber que existen diferentes productos en función del uso al que esté destinada nuestra vivienda. Las aseguradoras ofrecen seguros para la vivienda habitual y para segundas residencias, así como para arrendadores e inquilinos de pisos de alquiler. 

A grandes rasgos, podemos diferenciar entre los distintos seguros de hogar que cubren únicamente el continente o aquellos que aseguran también el contenido. Destaca, en primer lugar, el seguro de daños de la vivienda, que contempla el continente y que es obligatorio por ley en caso de que nuestra vivienda esté hipotecada. Es la cobertura mínima para cubrir el gasto de la hipoteca en caso de siniestro grave. 

Para tener una cobertura más amplia, lo mejor es tener contratado, como Marta y Álex, un seguro multirriesgo del hogar, que cubre tanto el continente, como el contenido e incluye la responsabilidad civil a terceros. Este tipo de seguro multirriesgo, el más habitual entre los asegurados en España, contempla incendios, explosiones, robos, daños por agua, daños eléctricos, rotura de cristales, elementos sanitarios, placas vitrocerámicas, la defensa jurídica, las reclamaciones ante terceros y un largo etcétera de coberturas que variará en función de la aseguradora contratada.

Incendios, una pesadilla frecuente

¿Sabías que en el 2019, en España, se produjeron 54 incendios en viviendas al día? Son datos del ‘Estudio de Víctimas de Incendio en España: 2010-2019’, realizado por la Asociación Profesional de Técnicos de Bomberos (APTB), además de otras entidades. Durante el año 2019 hubo un total de 129.544 incendios en España, un 9% más que el año anterior. De ellos, concretamente 19.661 tuvieron lugar en viviendas. Y es que, lamentablemente, son comunes los incendios en domicilios, bien sea a causa de fallos eléctricos, fuga de gases, combustibles como el butano, o vinculados a artefactos de calefacción en mal estado. 

Imagina despertar en medio de la noche a causa de un fuerte olor a humo en casa. Esto es lo que le sucedió a Paco, un vecino de Lleida de 53 años que vive con su mujer y su madre. Sufrió un incendio en casa en junio a causa de una mala conexión del enchufe del lavavajillas. Al ocurrir durante la noche, sin nadie despierto, las llamas se propagaron rápidamente por la cocina y el humo se expandió por el salón y el comedor. Paco explica cómo el fuerte olor a humo les despertó y se dieron cuenta antes de que el fuego afectara al resto de habitaciones, evitando así males mayores. Tras desalojar a su mujer y a su madre, Paco, intentó apagar el incendio con un extintor que, por suerte, tenía en la entrada. Pero el fuego se extendía rápidamente y tuvo que llamar a los bomberos para acabar de extinguir el incendio.

Tras informar de lo sucedido, su compañía aseguradora abordó el problema lo antes posible. En primer lugar se procedió a la restauración de la luz en la vivienda mediante una reparación temporal. El perito de la compañía aseguradora revisó los daños al día siguiente; era necesario llevar a cabo una limpieza de los restos de polvo del extintor, volver a pintar la cocina y reparar el mobiliario deteriorado. Al cabo de quince días, el perito no tenía el presupuesto total del mobiliario de cocina, por lo que la aseguradora estimó, para comenzar, el importe mínimo ante estos accidentes, con el fin de abordar cuanto antes las reparaciones, para que Paco y su familia pudiesen volver a casa. Poco después, el perito recibió el presupuesto para sustituir el mobiliario de cocina, pudo cerrar el informe y completar la indemnización para reparar todos los daños causados por el incendio. La suma finalmente superó los 15.000 €.

Es recomendable revisar en la póliza del seguro qué se incluye en cada cobertura

Lamentablemente, casos como los de Marta, Álex y Paco ocurren a diario. Sin ir más lejos, los seguros de hogar atienden más de 19.000 casos de accidentes domésticos diarios en España, según datos de ‘Estamos Seguros’. De todos estos avisos de accidentes en hogares, como ya explicamos previamente, los más habitules son los relacionadas con daños por agua, más concretamente un 33,9%, seguidos de los de cristales, con un 15,7%, y muy de cerca, con un 10,4%, los realcionados con problemas eléctricos, según información obtenida a través del estudio ‘Análisis Técnico de los Seguros Multirriesgo’ de ICEA, el servicio de estadísticas y estudios del sector seguros en España. En cuanto a los costes de un accidente, ICEA estima que, por ejemplo, el importe medio por siniestro en caso de incendio supera los 2.500 euros. Este es el precio medio que los propietarios de viviendas deberían abonar de forma íntegra en caso de sufrir un incendio y no disponer de un seguro de hogar. 

Es por esto por lo que tener un buen seguro de hogar, y estar seguro de tener cubiertos todos estos incidentes, es de suma importancia para poder dormir tranquilo. Debemos tener en cuenta que, cada aseguradora, tiene distintas coberturas y cubre un porcentaje de contenido y continente diferente. Por eso, para evitar sorpresas desagradables, aconsejamos revisar bien la letra pequeña de la póliza de hogar para saber qué se incluye en cada cobertura antes de firmar. Además, a la hora de optar por una u otra compañía, el asesoramiento es un punto de especial valor a tener en cuenta. Contar con un agente de seguros especializado que nos asesore correctamente en momentos tan importantes y delicados como un accidente en casa, que puede suponer la pérdida de bienes de gran valor, tanto económico como emocional, es clave.