Está en uno de esos momentos profesionales que pueden calificarse como perfectos. Tiene su propio programa de televisión, ha sacado cuatro fragancias al mercado, una línea de ropa que cuenta con varias colecciones, colabora con una marca de maquillaje y en el mundo de la música sus éxitos se cuentan a pares. Pero no todo ha sido de color de rosa... Y, además, para deleite de sus numerosos fans, se ha colgado en las redes sociales un sugerente video en la que se la ve haciendo los preparativos para un concierto con un baile que no deja indiferente.

Rihanna ha concedido a la revista Glamour una de sus entrevistas más sinceras, y lo ha hecho en un lugar muy especial: Barbados. Cuando vuelve a la tierra que la vio nacer deja atrás a la diva y se convierte en Robyn, la chica que dejó la isla para triunfar en la música y que cada vez que regresa solo busca paz y volver a ser esa chica corriente. Pero no todos sus recuerdos son motivo de alegría, su infancia fue algo dura y durante toda su época de colegio ha confesado que tuvo que "sufrir las burlas de todos sus compañeros".

La intérprete de 'Diamonds' ha confesado a la revista que primero fue por su color de piel (que era más claro que el de los demás) y a medida que se iba haciendo mayor, por su pecho. Eso sí, lejos de sentir rencor, la cantante cree que "Dios puso en mi camino estas experiencias estratégicamente, como una forma de prepararme para la industria de la música". Ha admitido a Glamour que gracias a esas experiencias, ahora le es más fácil enfrentarse a las mentiras.

En cuanto al mundo de la moda, al hablar de las mejor vestidas Rihanna lo tiene claro. Nicole Richie la "saca de sus casillas", aunque la mejor de todos los tiempos es sin duda la Princesa Diana. La de Barbados afirma que los modelos de la Princesa eran perfectos: "Cada look era perfecto. Era muy gamberra con la ropa".

A pesar de tener una auténtica legión de fans, todo artista tiene también detractores que intentan golpear duramente con sus palabras, y ahora con las redes sociales este ataque verbal es aún más fácil. Pero Riri lo tiene claro: "Yo no me voy a derrumbar, nunca", ya que lo importante en la vida es recordar y comprender que "cada uno de nosotros tiene un vínculo con Dios" y una vez que esto queda claro, "es muy difícil que te preocupe lo que la gente piensa de ti, ganas confianza en ti misma".

Una mujer todoterreno que intenta ver la parte positiva a todos los problemas, trabajar duro para conseguir todas sus metas y cuando el momento llegue, formar su propia familia.