Mariah Carey luce un cuerpo de infarto en la portada de su nuevo disco por obra y gracia del Photoshop. La cantante estadounidense se ha transformado por completo y aparece con una imagen muy alejada de la realidad.

Y es que la última vez que se vio en público a Carey fue en una gala celebrada en marzo pasado, en la que la vimos embutida en un traje negro que dejaba a la vista unas curvas que han desaparecido de la portada del disco.

La artista de 44 años se sometió a una estricta dieta de adelgazamiento tras dar a luz a sus mellizos en 2012. Durante su embarazó engordó 14 kilos y la propia Carey admitió que estaba preocupada ante la posibilidad de no volver recuperar su figura.

Su nuevo disco lleva por título '#1 To Infinity' y recoge todos los números uno de la cantante a lo largo de su carrera.