Explica Marta Etura (San Sebastián, 1978) que danzar le produce un placer que no siempre encuentra en la interpretación, "simplemente porque no es mi profesión, lo que me hace estar muy relajada". "Bailo desde siempre porque me da felicidad; me da paz. Me olvido de todo y vuelo. No pienso en nada más que en el siguiente paso. ¿Terapia?, puede, pero sobre todo es placer", añade.

Hace algún tiempo debutaba en los escenarios como actriz bailarina en el espectáculo 'Return', que mezclaba ambas disciplinas. Ahora, la ganadora del Goya a la mejor actriz de reparto por Celda 211 vuelve al cine por partida doble.

En 'Sexo fácil, películas tristes' es la protagonista de una comedia romántica que un guionista escribe durante el filme. "Es cine dentro del cine, y eso me encanta. Esas películas que tienen capa sobre capa. Es una sencilla historia de amor, pero como en estas historias románticas aparece todo idealizado, Quim Gutiérrez y yo salimos guapísimos y en lugares ideales", comenta riendo.

"La realidad del guionista no es tan bonita", explica. Además, forma parte del amplio elenco de 'Hablar', de Joaquín Oristrell, filmado en una sola secuencia de 70 minutos, "hecha, por tanto, del tirón". "Tengo la suerte de amar una profesión que me está dando muchas alegrías", dice.