La modelo Coco Rocha, portada del número de septiembre de "Elle" España, ha confesado a esta revista cómo superó su anorexia y ha lamentado que las exigencias de la industria de la moda hicieran peligrar su salud en vez de velar por ella.

"Cuando eres delgada y alguien te pide que lo seas más, te quieres morir, miras alrededor y dices: Tendríais que estar cuidando de mí en lugar de hacerme enfermar", denuncia en el reportaje esta canadiense de 24 años, que luce mucho mejor aspecto tras recuperarse de la enfermedad.

"Hubo un momento en mi carrera en la que llegué a perder 48 kilos, entonces me dijeron que parase", confiesa.

La joven, casada hace dos años, considera que "el matrimonio es más feliz que el noviazgo" y entre sus necesidades actuales se encuentran el trabajo y el amor, algo que, dice, compagina "perfectamente".

En cuatro sesiones fotográficas en Madrid y Barcelona en las que la joven ha posado con muy diversos atuendos, de época y actuales, se ha puesto frente a la cámara en el Museo del Ferrocarril vestida con indumentaria de los años cuarenta y ha escenificado un robo a un banco y la posterior persecución policíaca.

No es la primera vez que la modelo declara abiertamente su oposición a las restricciones de peso impuestas por los cánones de la pasarela en detrimento de la salud de las modelos, que ha denunciado en publicaciones como Vogue o en su propio blog.

En él se lamentaba hace dos años del revuelo suscitado por varios artículos publicados en "New York Times" y "The New York Daily News" sobre ella, y declaraba que, siendo "15 centímetros más alta y vistiendo diez tallas menos que la media de la mujer americana", era considerada "demasiado gorda para la pasarela".