El European Hydration Institute, fundación que promueve la hidratación humana y sus efectos para la salud, el bienestar y el rendimiento físico y cognitivo advierte de la importancia de mantener una adecuada hidratación, especialmente en momentos de calor, cuando se realizan actividades físicas o incluso durante los viajes y desplazamientos en carretera.

Los mareos, el cansancio, el dolor de cabeza, la debilidad o la somnolencia son síntomas de deshidratación. El EHI advierte que pueden llegar a afectar al rendimiento físico, la capacidad cognitiva, la termorregulación e incluso a alterar la función cardiovascular.

Según el profesor Lluís Serra-Majem, miembro del Comité Científico Asesor del European Hydration Institute:"las consecuencias de no estar correctamente hidratados en la salud pueden ser de dos tipos: agudas, que pueden aparecer en horas o a los pocos días de beber pocos líquidos, como dolor de cabeza, falta de concentración, sed o incluso pérdida de conciencia, o crónicas, como estreñimiento, falta de rendimiento, o incluso en enfermedades más graves".

El Profesor continuaba: "Se ha hecho poco hincapié en el consumo de líquidos pero es importante como prevención de enfermedades". En verano, sobre todo en momentos de máximo calor, hay que aumentar el consumo de líquidos. El profesor además añade que: "particularmente si hacemos ejercicio físico, incluso al caminar, y adecuarlo a las horas de máximo calor y actividad".

La hidratación en los viajes

Hay que prestar especial atención de cara a la operación salida, si viajamos en avión, o en coche especialmente: "Mientras viajamos en transporte público o privado debemos tener unas pautas de hidratación particulares, sobre todo cuando vamos al volante, sería conveniente, al menos, beber cada dos horas, no mientras conducimos sino parar, hacer ejercicio y beber líquidos". "Porque la deshidratación aumenta el número de accidentes de tráfico", explica el profesor Serra-Majem.

El aire acondicionado aumenta el riesgo de un estado de hidratación inadecuada convirtiendo el aire en seco y menos húmedo, por ello debemos beber más para no sufrir los efectos de la deshidratación.

El aporte hídrico de una correcta dieta proviene de: un 50% en forma de agua, un 30% de otras bebidas, y un 20%a partir de otros alimentos. Sin embargo lasnecesidades de hidratación varían según la edad, en hombres, mujeres y niños, así como las condiciones físicas y medio ambientales. "Aproximadamente se deben beber unos 2l. -2,5l. al día, a partir de variedad de bebidas, y alimentos". "Una buena recomendación es ingerir aproximadamente 8 vasos al día, en adultos, siendo estos más pequeños en niños", explica el profesor.

Para el Profesor Serra-Majem: "es muy importante equilibrar las ingestas, lo que bebemos, con lo que perdemos,básicamente las pérdidas se producen por orina, por sudoración o incluso por transpiración, y el mantener este equilibro nos garantiza una buena hidratación".

La sed es un indicador para regir lo que tenemos que beber, pero sin embargo:"A veces la sed aparece cuando ya existe una cierta deshidratación; Hay ciertos grupos de edad donde esto no funciona, en niños y personas mayores, el signo de sed es tardío o inadecuado, muchas veces no responde a una necesidad real", advierte Lluís Serra- Majem.

Aparte de la sed, existen ciertos indicadores que, con un simple gesto, nos pueden señalar nuestro estado de hidratación. Uno de ellos es el color de nuestra orina: "si son claras indican un aumento de hidratación, y orinas más oscuras indican una cierta deshidratación, por eso lo ideal es tener colores intermedios"; y otro la pérdida de peso: "cuando se realiza una actividad física intensa o incluso dormidos, la pérdida de peso es un síntoma de pérdida de agua", apunta el experto.