Los cigarrillos electrónicos están encendiendo el debate dentro de la comunidad médica, algunos argumentan que están criando una nueva generación de fumadores, mientras que otros expertos convienen que el vapor de los e-cigarrillos es más seguro que fumar los cigarrillos tradicionales.

"Los cigarrillos electrónicos son al menos 90 por ciento menos dañinos y tal vez incluso menos dañinos que eso", dijo Jonathan Foulds, quien estudia la adicción al tabaco en Penn State Milton S. Hershey Medical Center.

Jonathan Foulds estudia la adicción al tabaco en el Penn State Milton S. Hershey Medical Center y piensa que los cigarrillos electrónicos pueden ser una alternativa más segura a los cigarrillos de tabaco.

Foulds cree que los e-cigarrillos podrían ser el tan ansiado método eficaz de remplazo para dejar de fumar: un dispositivo que puede suministrar nicotina, al tiempo que excluye la mayoría de los agentes causantes de cáncer contenidos en el humo del tabaco.

La combustión del tabaco produce miles de productos químicos, entre ellos docenas que causan cáncer. Produce monóxido de carbono, que es un gas venenoso, y alquitrán, que bloquea los pulmones.

"Realmente es el humo el que causa el daño", comentó Foulds.

Los cigarros electrónicos, por otra parte, implican no fumar sino el vapor que resulta de la nicotina calentada. El vapor contiene pocas de las toxinas contenidas en el humo del cigarrillo. No contiene monóxido de carbono ni alquitrán, según Foulds y otros expertos médicos.

Según Foulds, sí puede contener nicotina, aunque esta en sí no es el ingrediente que cause el cáncer en el humo del cigarrillo. De todos modos, la nicotina puede contribuir a problemas cardiacos, aunque no es la causa principal de la enfermedad cardiaca resultante de fumar.

Pero, para la mayoría de los fumadores, "cualquier cigarrillo remplazado por el vapeo es con seguridad un paso en la dirección correcta", señaló.

La mayor preocupación es que los dispositivos resulten atractivos para quienes no fuman, en especial, para los jóvenes y conduzca a una adicción que termine en un uso pleno del tabaco de los cigarrillos convencionales.

"Los e-cigarrillos son al menos 90 por ciento menos dañinos (que los cigarrillos de tabaco), y pueden ser mucho menos dañinos que eso" - Jonathan Foulds

Un comité de la American Medical Association publicó recientemente: "Que los e-cigarrillos puedan de forma segura ayudar a la gente a abandonar el cigarrillo sigue siendo incierto, pero con sus sabores de frutas y dulces, tienen un potencial evidente para seducir a nuevos fumadores".

Respecto a los efectos de segunda mano de los e-cigarrillos, Foulds dice que son probablemente mucho menos severos que aquellos de los cigarrillos convencionales, aunque la ciencia todavía tiene que proporcionar respuestas definitivas.

Podría, dijo, producir una menor irritación a las personas con problemas pulmonares tales como asma y podría ser más dañino para aquellas con problemas cardiacos.