Un consorcio internacional de científicos ha identificado 38 variantes genéticas que pueden causar migraña -28 de ellas completamente nuevas-, lo que supone el mayor hallazgo sobre las causas de esta enfermedad hasta la fecha.

Para el estudio -realizado por investigadores de la Universidad de Barcelona, de la Universidad Autónoma de Barcelona y del Instituto de Investigación del Hospital Vall d'Hebrón-, se ha comparado el genoma de 375.000 individuos de Estados Unidos, Australia y Europa, 60.000 de ellos con migraña.

«Es importante porque ayudará a completar el mapa genético de las diferentes formas de migraña, a definir los mecanismos genéticos que están detrás de este trastorno, y a buscar tratamientos que combatan las causas, no sólo los síntomas», explicó ayer la bióloga Ester Cuenca-León, del Instituto de Investigación del Hospital Vall d'Hebrón de Barcelona.

Pese a su alta frecuencia -una de cada siete personas en el mundo la sufre, lo que supone más del 15 % de la población mundial-, las causas de la migraña son todavía «muy desconocidas», apuntó.

Hasta ahora, se habían identificado algunas variantes genéticas de las formas de migraña más raras, las que se producen por la mutación de un sólo gen y que se dan «en menos de una persona de cada mil», puntualizó Bru Cormand, investigador de la Universidad de Barcelona y miembro del Consorcio Internacional de Genética de las Cefaleas.

En el caso de la migraña común, por el contrario, el mapa genético de esta enfermedad es mucho más variado, ya que «tiene una base genética compleja y poligénica, es decir, que para sufrir este trastorno hay que tener varios genes alterados. Es la suma de cada una de estas alteraciones la que al final conduce a la migraña», según Cormand, lo que más se desconoce.

Gracias a la enorme muestra de este estudio (375.000 individuos), los investigadores han podido realizar un metaanálisis que ha permitido identificar 38 variantes genéticas asociadas a la migraña, 28 de las cuales, no se habían descrito antes, y otras diez fueron descubiertas en varios trabajos previos.

El estudio reabre el debate sobre si esta enfermedad es neuronal o vascular; ha descubierto que los genes que causan migraña común y los que predisponen a las formas más raras de esta enfermedad «son completamente distintos»; y será útil para, a medio plazo, obtener tratamientos más personalizados.