Tras su presentación el pasado día 9, han llegado a nuestro país el iPhone 6 y el iPhone 6 Plus precedido por un éxito sin precedentes en el mundo de la telefonía móvil. Y es que si por algo destaca el nuevo dispositivo de Apple más allá del enorme revuelo informativo que ha provocado en todo el mundo es por haberse convertido en el smartphone con el mejor lanzamiento en la historia de la telefonía móvil con más de 10 millones de unidades vendidas en el primer fin de semana. El propio Tim Cook, presidente ejecutido de Apple, no dudaba en afirmar que «las ventas del iPhone 6 e iPhone 6 Plus han superado nuestras expectativas en el fin de semana de su lanzamiento».
Esta nueva versión del conocido iPhone, el teléfono que inició la era de los smartphones en el año 2007, incorpora algunas características realmente novedosas. Pero pese a no ser un dispositivo rompedor como sí lo fuera el primer iPhone, se nota que la empresa norteamericana ha escuchado a los usuarios a la hora de crear estos nuevos dispositivos.
Todo, desde sus nuevas aplicaciones hasta la nueva cámara o su potente procesador, han sido creados para potenciar los usos más habituales que se le dan en la actualidad a los dispositivos móviles.
El smartphone se ha convertido en el sustituto natural de cámaras de fotos y vídeo, y conscientes de ello, el iPhone 6 incorpora nuevas tecnologías que lo convierten en un súper clase. Las fotos salen nítidas, brillantes y con una calidad que sorprende. Gracias al vídeo superlento del iPhone 6 Plus que puede grabar incluso a 240 imágenes por segundo, los vídeos caseros pueden entrar en un nuevo universo único y sorprendente.
Aunque lo que realmente sorprende de estos dispositivos es el nuevo paquete de software que incorpora.
El usuario medio no suele notar realmente las mejoras hechas en el hardware. Tan solo usuarios avanzados, capaces de exprimir al máximo un dispositivo son capaces de apreciar esas diferencias de rendimiento. Pero el software, el sistema operativo, en definitiva las aplicaciones, son las que marcan la diferencia entre el más rotundo éxito y el fracaso más estrepitoso. Y Apple lo sabe. Tal vez por ello la compañía norteamericana ha echado el resto en el nuevo iOS 8, el sistema operativo más avanzado jamás visto en un dispositivo de la compañía. Innumerables mejoras algunas ya presentes en los sistemas Android y todo un mundo por explorar en lo relativo a aplicaciones de salud y sanidad, hacen que el futuro de los dispositivos móviles sea más prometedor que nunca para el ser humano.
El tamaño sí importa
¿Pero qué diferencias hay realmente entre el iPhone 6 y el iPhone 6 Plus? Pocas. El tamaño tanto de la pantalla como de la batería y una cámara con estabilizador óptico en el Plus marcan la diferencia principal. Apple ha cogido el testigo de unos usuarios que reclaman pantallas cada vez más grandes y, pese a que en un principio la compañía era reacia a ese tipo de dispositivos, al final han cambiado de idea. Y una pantalla más grande significa más espacio para una batería también mayor. El iPhone 6 Plus es capaz de que un usuario medio finalice el día sin problemas de batería, tal y como ya han conseguido otros móviles de gran tamaño del mercado. Pero atención a los usuarios intensivos, porque desgraciadamente, el cargador nos seguirá haciendo falta a lo largo del día.
