Fue uno de los culpables de que Requena se incluyese en la DO Cava, ¿en aquel momento pensaron que el cava de Requena alcanzaría el potencial actual?

No, en absoluto. En aquel momento nosotros aspirabamos a consolidar la bodega, y el cava se planteaba como un simple complemento para los vinos de Requena. Aquella lucha, con el paso de los años, se ha traducido en un éxito sin precedentes, y en estos momentos el futuro del sector del cava en Requena sigue apuntando hacia un crecimiento alto, por lo que los productores de cava tendríamos que adelantarnos al futuro para ordenar ese crecimiento en función del mercado.

¿Dominio de la Vega sigue siendo la misma bodega familiar que se fundó en 2001?

Si, la filosofía sigue siendo la misma, una bodega familiar en la que las personas son importantes y que produce vinos y cavas de un nivel de calidad medio-alto y buena relación calidad-precio. Basamos nuestro desarrollo en la idea de mantener la calidad del producto por encima del volumen de producción. Cuando fundamos la compañía fue Álvaro Faubel quien más influyó en este planteamiento, y ahora que nos ha dejado la bodega seguirá fiel a su concepción.

¿Le sorprende el auge adquirido por los vinos de Bobal en los últimos años?

La verdad es que no, al menos en estos últimos quince años, pero en otras épocas ni yo ni nadie la valoraba como ahora. Buscábamos volumen porque pensábamos que era una uva poco expresiva, pero las nuevas generaciones de enólogos nos han quitado la razón, y en estos momentos estamos ante un producto de características únicas con unas perspectivas fabulosas.

La compañía que preside, ¿es una bodega de vinos o de cavas?

De vinos y de cavas. Es cierto que tradicionalmente se nos ha conocido más por los cavas —sobre todo por nuestro Brut Reserva Especial, el de la etiqueta amarilla— que por los vinos, pero en estos momentos nuestra producción está bastante equilibrada y hacemos un 60% de cavas por un 40% de vinos tranquilos. Además, en las últimas campañas hemos potenciado nuestra linea de vinos de alta expresión con un trio de tintos —Bobal en Calma, Paraje Tornel y Finca La Beata— en los que la uva Bobal tiene todo el protagonismo.

¿Está estacionalizado en consumo de cava?

Y el de vino. Si te fijas en el resto de bodegas —tanto de cavas como de vinos tranquilos—, la mayor cantidad de ventas se localiza en estas fechas de fin de año. Es algo que ya ocurría en otras épocas cuando yo estaba en bodegas que sólo elaboraban vino.