"Vinaroz y Benicarló son dos hermanas, bellas y bien dotadas, algo celosas una de otra, medio labradoras y medio marineras, que a corta distancia pusieron casa en la misma playa, y comparten la explotación de la pesca, del comercio naval y de su extensa y bien roturada llanura".

València. Sus monumentos y artes. Su naturaleza e historia. Teodoro Llorente (1887-1889)

"Se levantan a lo lejos los edificios de Vinaroz, y atravesando viñedos y campos de algarrobos se entra en un nuevo género de huertas, que la industria y el trabajo ímprobo supo formar en un suelo árido, abriendo pozos, y robando a la tierra las aguas que escondía en sus entrañas".

"Se halla cultivado el término entre los de Benicarló y Cenia en las inmediaciones al mar, esto es, por espacio de hora y media. Aquí se ve aquella multitud de zúas que los naturales llaman cenias, con cuyas aguas riegan 250 jornales de tierra, variando de mil modos las producciones, y haciendo creer al que las mire de paso y sin examen, que el suelo está fertilizado por aguas de copiosas fuentes o de algún río, no habiendo otras en realidad que las zúas sacan de las entrañas de la tierra".

"Todo lo merecen los de Benicarló si se examina y pesa el ímprobo trabajo que les cuestan las huertas. Se halla el agua a bastante profundidad, y taladran la tierra para robarle este tesoro: con estas aguas riegan los campos día y noche; trabajan a todas horas, tomándose muy pocas para descansar o cobrar aliento; nada omiten a fin de multiplicar las producciones, y darles pronta salida".

Observaciones sobre la historia natural, geografía, agricultura, población y frutos del Reyno de València. Antonio J. Cavanilles (1797)

"El garrofer domina grans extensions de terres pedregoses a la costa, que no serveixen per a cap altre conreu, sempre per baix del 400 m (67 per 100 a Peníscola,€ i 32 a Benicarló)".

El litoral valencià. V.M. Rosselló i Verger (1969)

"La plana de Benicarló és àrida: la seva horta, els seus fruiters, es reguen a base exclusivament de sènies de tracció animal, i una passejada pels encontorns, a l´atzar dels camps, ens descobrirà l´abundància d´aquests pous rústics, a pocs passos uns dels altres".

Viatge pel País Valencià. Joan Fuster (1971)

La Plana de Vinaròs-Benicarló se ubica en la comarca del Baix Maestrat, situada en el extremo septentrional de la Comunitat Valenciana. Se extiende entre Serra del Montsià en el norte, la Serra d´Irta en el sur y la alineación de la Serra de Valldàngel - Serra del Turmell en el oeste. En el litoral de esta llanura se asientan los principales núcleos de población de la comarca: Vinaròs y Benicarló. El clima es benigno a consecuencia a su proximidad al mar y escasa altitud. Se puede clasificar como típicamente mediterráneo debido a las características de las temperaturas y precipitaciones. La temperatura media anual de esta zona está en torno a 17 ºC siendo el mes más frío enero y el más cálido agosto, con medias mensuales de 10 ºC y 25 ºC respectivamente. Las precipitaciones medias anules oscilan entre 450 mm y 550 mm, concentradas principalmente en otoño, y se caracterizan por su irregularidad y torrencialidad. Las máximas de precipitaciones en 24 horas pueden concentrar el 35% del total anual. Estas lluvias extremas son la causa desencadenante de las avenidas e inundaciones que sufre la plana de Vinaròs-Benicarló. La precipitación necesaria para que las ramblas circulen es de 65 mm aproximadamente, fenómeno que suele ocurrir con una frecuencia de entre 2 a 3 veces al año.

La llanura se emplaza en la fosa tectónica más oriental del sistema horst-graben, al pie de las últimas estribaciones de la cordillera ibérica. Desde el punto de vista morfológico, puede tomarse como un verdadero modelo de glacis de erosión. Se trata de una estructura hundida, paralela a la costa, Cuyo basamento calcáreo se hunde hacia el mar.

Está formada por potentes abanicos aluviales, cuya convexidad y multiplicidad de canales facilita la divergencia de los flujos, y sus elevadas pendientes evitan el estancamiento de las aguas. Este llano litoral recibe y acumula sedimentos aportados por los numerosos cauces que lo surcan, entre los que destacan los ríos de la Senia, el Cèrvol y la rambla Cervera. Son cursos que tienen como carácter distintivo la presencia de múltiples cauces o diversos elementos del mismo (tipo braided). Además presentan diversos escalones debido a la dificultad para atravesar las capas duras de los abanicos más antiguos. En otro estadio menor se halla una multitud de barrancos de corto recorrido que sitúan sus cabeceras en la misma llanura, aprovechando antiguos cauces de los barrancos principales. Esta red hidrográfica ha configurado un paisaje de fértiles terrenos y apacibles playas y calas, así como acantilados que superan los quince metros de altura.

El medio natural presenta un paisaje antropizado, debido a una ancestral explotación agrícola, que alterna con bosquetes aislados en los que se desarrolla el pino y la encina. Estas especies abundan en agrupaciones boscosas ubicadas en las zonas montañosas que bordean el llano litoral. El llano de Vinaròs-Benicarló posee una posición privilegiada al encontrarse al centro de tres parques naturales relevantes: la Serra d´Irta, Els Ports-Besseït y el Delta del Ebro, aunque ninguno de ellos forma parte de la propia llanura.

En el límite municipal entre Vinaròs y Calig se declaró la microrreserva del Barranc d'Aigua Oliva en el año 2003 con una superficie 1,53 ha (1,05 Ha en Vinaròs). En el año 2002 se protegió el humedal de la desembocadura del Riu de la Sénia que posee una extensión aproximada de 5,5 Ha. Recientemente se ha declarado en Vinaròs el Paraje natural municipal de la Serra del Puig con 17,45 Ha.

El paisaje de este territorio se ha ido configurando por la práctica de la agricultura a través del diseño del parcelario agrícola que se extiende a la práctica totalidad del suelo. La mayor parte de la superficie cultivada es de regadío ligado al nivel freático, con aguas de baja calidad y de gran contenido de cloruro sódico, pero de escasa profundidad. Tradicionalmente estas aguas han sido extraídas mediante una multitud de norias, pero en la década de los sesenta fueron sustituidas por motores, que escasean en la actualidad. El 90% de la superficie agrícola en Vinaròs se destina al cultivo citrícola, y solo el 5% se dedica a la producción hortícola. Sin embargo, en Benicarló los cítricos no superan el 40% mientras las hortalizas alcanzan la mitad de la superficie cultivada. En este municipio la alcachofa es el producto más representativo y posee denominación de origen protegida.

Ambos municipios tienen puertos dedicados principalmente a la pesca y en la actualidad concentran la tercera parte de la flota pesquera operativa de la provincia de Castellón. La Conselleria de Agricultura, Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Rural ha recomendado que los langostinos capturados en los puertos castellonenses lo hagan bajo la marca "DO Langostino de Vinaròs".

A lo largo del litoral de la plana de Vinaròs-Benicarló existen un total de 31 calas y playas, de las cuales 26 se hallan en la costa vinarocense y los 5 restantes en la benicarlanda (alrededor de 4 km de playas en cada término). En 2016 cada municipio cuenta con dos banderas azules.

Se celebran en Vinaròs y Benicarló cuatro fiestas declaradas de interés turístico autonómico, que son la Semana Santa y el Carnaval en el primero, y la Festa de la Carxofa y las Fallas en el segundo. Además en Benicarló se celebra la Festa i Fira de Sant Antoni Abat de interés turístico provincial.

Después de la conquista se entregó la carta puebla a Benicarló a 30 pobladores en 1236, cinco años más tarde, en 1241, se entregó a Vinaròs a 50 pobladores. En 1359, convertidas en poblaciones de cierta importancia, obtuvieron la independencia de Peníscola y recibieron término y jurisdicción propia.

Vinaròs se encuentra a escasos metros de la costa y a una altitud de 6 m sobre el nivel del mar. En el siglo XIV se ordenó la construcción de un Recinto Amurallado de aproximadamente una hectárea. La muralla cuadrangular contaba con cuatro torres: Torre del Migdia, Torre dels Alfacs, Torre Jaumeta o Jussana y la Torre d´En Cifré; y dos puertas: La Porta d´Avall que se abría hacia el mar, y La Porta d´Amunt, en el otro extremo del Carrer Major. En el siglo XIX se construyó una nueva muralla que incluyó el anterior y el barrio marinero.

La Iglesia Parroquial de la Asunción de María (1582-1667) de estilo gótico valenciano, se sitúa en el recinto medieval, junto a La Porta d´Amunt. Sustituyó a una anterior situada en el solar que ocupa el Ayuntamiento. Su planta es rectangular, de una sola nave dividida en seis tramos, con capillas entre contrafuertes y un ábside ochavado. La fábrica es de mampostería combinada con sillares en los elementos sustentantes. En su exterior destaca la portalada retablo, un ejemplo del barroco valenciano. Ejercía funciones religiosas y defensiva con rasgos de los templos-fortaleza mediterráneos.

En el Puig de la Misericordia se observan los restos de un pequeño hábitat rural musulmán, en el que destaca la presencia de la Torre de los Moros, de planta rectangular con unas medidas de 6,4 x 5,9 metros. En lo alto del cerro se localiza el Yacimiento Ibérico del Puig de la Misericordia, donde se han encontrado distintos restos de cerámica ibérica. Posteriormente, se levantó la Ermita de la Virgen de la Misericordia y San Sebastián documentada al menos desde el siglo XV. Se sitúa en la mitad de la ladera. Su posición le permitía una perfecta visibilidad sobre la planicie donde se asienta la población de Vinaròs. En el cercano cerro del Perengil se localiza el yacimiento homónimo, que conserva una torre de defensa de época ibérica.

El casco antiguo de Benicarló está ubicado a unos 500 metros de la línea de costa y a 11 m de sobre el nivel del mar. Tiene forma cuadrada o ligeramente romboidal dividido en cuatro cuarteles por dos ejes perpendiculares (Carrer Major y Carrer de San Joan). La muralla levantada por la orden de Montesa tendría, al menos, dos puertas, las del Oeste y la del Este, así como varias torres con foso.

La Iglesia de San Bartolomé (1724-1743) es una edificación nueva que sustituyó la anterior iglesia. Se ubica en las proximidades del Ayuntamiento. Tiene una arquitectura propia de la última fase del barroco, con un campanario octogonal separado de la iglesia. La fachada es de piedra labrada y posee una monumental portada barroca de dos cuerpos flanqueados por esbeltas columnas salomónicas exentas. El templo tiene una sola nave con crucero y capillas. A escasos 300 m de esta iglesia se encuentran los restos del Antiguo Convento de San Francisco levantado en el siglo XVI. Debido a las sucesivas intervenciones, el edificio que hoy se observa es del siglo XVIII. Parece ser que el convento con sus dependencias y el huerto ocupó una superficie aproximada a los 2000 m2, y se desarrollaban en dos edificaciones de planta rectangular y tres pisos.

En el Puig de la Nau se localiza la Torre de los Mártires, una antigua torre de vigilancia que se ubican en las proximidades de la Ermita del mismo nombre. En la cima del cerro, a unos 160 metros de altitud, está el Poblado Íbero Fortificado Puig de la Nau. Mantiene la estructura urbana definida por calles, casas y talleres. Destaca la excelente conservación con paredes de las viviendas que alcanzan los dos metros de altura, y las murallas.