¿Cómo es un día ideal de vacaciones?

Como ya sé que si me quedo en València no paro y hago algo de trabajo, trato de hacer lo que no puedo hacer en ningún otro momento del año: viajar. Lo mío es el turismo urbano. Descubrir nuevas ciudades y maneras de vivirla fijándome, sobre todo, en urbanismo y arquitectura. Si me quedo en la ciudad paseo por algún barrio con los cascos puestos en busca de alguna orxata.

¿Qué aficiones tiene?

Las responsabilidades me hacen tenerla algo descuidadas, pero el teatro, el arte contemporáneo y, sobre todo, la música indie es lo que me ayuda a desconectar cuando puedo.

¿Qué tal se maneja en los fogones?

Fatal. Nunca conquistaré a nadie en la cocina... Pero preparando mojitos me defiendo.

¿Cuál es el último libro que ha leído?

He aprovechado para releerme «De Categoria (Internacional)». Un divertido libro de Vicent Marco sobre los tópicos de los valencianos.

Pincha una rueda del coche. ¿Se arremanga o llama a la grúa?

No tengo coche. Pero cuando he pinchado la bici he ido directo al taller. No soy muy manitas...

¿Practica algún deporte para mantener la forma?

Nunca he sido el atleta de la clase... pero por suerte me encanta caminar.

No podría vivir sin...

Me temo que sin redes sociales. Pero tampoco sin chocolate, sin buena música, sin abrazos y, sobre todo, sin sentido del humor. Sin él nada tiene sentido.