J. E. Munera, Alacant

El portavoz socialista en el Ayuntamiento de Alacant, Blas Bernal, hizo caso omiso a las instrucciones del secretario de Relaciones Institucionales del PSPV, Antoni Such, para que el grupo municipal incluyera en sus alegaciones al plan parcial de Rabasa la petición de anulación de todos los acuerdos sobre el polémico proyecto adoptados en el pleno del pasado 26 de abril: su aprobación provisional y su adjudicación a Viviendas Sociales del Mediterráneo, grupo empresarial liderado por el constructor Enrique Ortiz. La petición, según confirmaron ayer fuentes socialistas, se formalizó a través de un fax remitido desde la dirección nacional del PSPV al grupo municipal el pasado 22 de septiembre, un día antes de la fecha del cierre de plazo para la presentación de alegaciones al plan que prevé la construcción de unas 15.000 viviendas sobre una superficie de 4,2 millones de metros cuadrados.