J. P., Elx

La aparición de un nuevo foco de picudo rojo, ahora en la pedanía de Daimés, ha desembocado en la publicación por parte de la Conselleria de Agricultura de una nueva resolución que declara otra área de vigilancia y paraliza cualquier movimiento de palmeras en un radio de 10 kilómetros dentro del cual se incluye el Palmeral histórico declarado Patrimonio de la Humanidad que la próxima semana se comenzará a tratar parcialmente para intentar frenar la entrada del insecto.

El foco se ha detectado en una plantación de 3.500 ejemplares de Phoenix dactilífera efectuada mediante semillas por un agricultor. A falta de la inspección de todas las palmeras de la finca, el concejal del Palmeral, Emilio Domenech, declaró que la cifra de ejemplares infectados y pendientes de destrucción ronda el centenar.

Cualquier atisbo de una rápida solución parece ahora descartado porque la situación «se vuelve ahora muy preocupante», según reconoció el concejal. De un lado, la plaga ya ha atacado a la palmera autóctona ilicitana, la Phoenix dactilífera puesto que en Valverde sólo había infectado a la canadiensis.

Por otro, el nuevo foco ha aparecido junto a la Vereda de Sendres, una zona repleta de viveros.

La Conselleria de Agricultura comunicó ayer que ya había mandado publicar una orden similar a la de Valverde en la que se establecen las mismas medidas de control y de inmovilización de palmeras que, en la practica, afectan ya a todo el término municipal y al medio millón de ejemplares de vivero.

El nuevo foco queda a 8 kilómetros del casco urbano por lo que el área de especial vigilancia afecta de lleno al Palmeral histórico. La actuación se centra ahora en «peinar palmera por palmera» para determinar los límites exactos del segundo foco -algo en lo que ya está trabajando el personal de la Conselleria de Agricultura, de la empresa encargada de la destrucción de la palmeras, Tragsa, y del Ayuntamiento- y en tratar aquellos ejemplares que no estén infectados para evitar que sean atacados por el picudo rojo». En este sentido, Domenech anunció que la próxima semana comenzará el tratamiento en el casco urbano de palmeras pequeñas, y de aquellos ejemplares que se han plantado en el último año.