A. G. A./C. P., Pego/Teulada

Hace ya tiempo que los ecologistas piden a la Conselleria que entierren los cables de la luz en zonas donde viven especies protegidas. Las repercusiones de que no se tomen medidas al respecto, se ponían ayer de manifiesto en el Marjal de Pego-Oliva donde apareció un Aguililla Calzada -hieraaetus pennatus- muerta justo debajo de un poste de la luz. Según denunció el representante de Acció Ecologista Agró, Joan Sala, «es bastante habitual que especies de aves protegidas mueran de esta forma». En este sentido, destacó que en la misma línea de postes eléctricos se encuentra hibernando un águila pescadora -pandion haliaetus- y por tanto corre el mismo peligro que la anterior. Esta especie se encuentra en peligro de extinción y tan sólo quedan «25 parejas en toda la Península Ibérica», explicó Sala.

Según denunció Joan Sala, esta «es la principal causa de mortalidad de estas especies». De hecho, sólo el año pasado murieron «cinco aves protegidas» en el parque natural del Montgó.

En este sentido, la conselleria debería de «enterrar las líneas eléctricas o aislarlas o obligar a las compañías eléctricas a aplicar una normativa que evite la muerte de estas especies», denunció el representante de Agró. Sin embargo, «sigue actuando con pasividad».

Estos hechos, advirtió Sala, han sido denunciados a la Sociedad de Española de Ornitología (SEO).

Las aves de Teulada-Moraira

Por otra parte, la pasada seman los miembros de la Sociedad Española de Ornitología (SEO), Alfonso Lario y Elías Gomis, y la Asociación Naturalicante presentaron el libro «Las aves de Teulada-Moraira» con motivo de la V Semana del Medio Ambiente.

Se han editado hasta 500 ejemplares en lengua castellana e inglesa y estarán a la venta la próxima semana con un precio de 10 euros.

El libro, de 142 páginas, recoge, entre otros aspectos, una descripción física sobre el municipio, un repaso de las 151 especies distintas de aves existentes en Teulada-Moraira, entre las que destacan el búho real, el águila azor-perdicera, la pardella balear y la collalba negra, así como los métodos de trabajo empleados, por los mismos.

Lario y Gomins explicaron el hábitat en el que se pueden encontrar las aves, como son bosques, ramblas, incluido el Senillar de Moraira, zonas de cultivo agrícolas y acantilados así como el sistema para censar las aves que habitan tanto en Teulada como en Moraira.