T. F./Levante de Alacant, Crevillent

Crevillent, una población del Baix Vinalopó de 27.000 habitantes, de los que aproximadamente 3.000 son inmigrantes, vive desde la noche del pasado domingo en un clima de tensión. El conflicto se desató tras el requerimiento de un vecino de la presencia policial, ante las continuas amenazas de muerte que estaba recibiendo por parte de un grupo de inmigrantes magrebíes. Pedro Miñano, el vecino aemenazado, graba en vídeo desde hace 18 meses imágenes de tráfico de drogas, robos de coches y peleas en la zona de San Vicente Ferrer y ya ha presentado en el cuartel de la Guardia Civil un total de 70 denuncias por hechos delictivos que ha presenciado cerca de su domicilio.

El vecino decidió acudir a pie al cuartel de la Guardia Civil a denunciar las amenazas de muerte que acababa de sufrir, cuando recibió el apoyo espontáneo de un grupo de vecinos, que acabaron convirtiéndose en una manifestación improvisada de cerca de un millar de personas que reclamaban más seguridad, tanto ante el domicilio del alcalde, como ante el cuartel de la Guardia Civil.

El ayuntamiento convocó una junta de portavoces extraordinaria el lunes para analizar los incidentes de la noche del domingo y el alcalde, César Asencio, aseguró tras la reunión que en sólo dos días, las fuerzas de seguridad locales habían tenido que intervenir en seis peleas y una amenaza con arma blanca. El primer edil calificó la situación de «insostenible» y pese a que aseguró que entendía la reacción de los vecinos, señaló que «mucha de la gente que se manifestaba el domingo ante mi casa, han sido fichados en muchas ocasiones por consumo de drogas». Representantes de las asociaciones vecinales y de comerciantes de Crevillent anunciaron ayer una reunión para el próximo lunes, día 17, en la cual concretarán soluciones y propuestas ante el clima de inseguridad que existe en la población y que se expondrá en una asamblea general a todos los vecinos convocada para tres días más tarde, el jueves 20.

El principal punto que se quería abordar en esta reunión era la posibilidad de organizar una concentración ante la puerta del Ayuntamiento como medida de presión por la actual situación de inseguridad ciudadana pero, tras la manifestación espontánea que se organizó el pasado domingo, las asociaciones lo han desestimado. En esta reunión se abordará asimismo la necesidad de ampliar en un corto período de tiempo los dispositivos de la policía en la zona de San Vicente Ferrer, pero se pretende que además de las medidas policiales el Ayuntamiento adopte también medidas políticas.

Manifestación de magrebíes

Por su parte, la asociación Imam Malik, que representa a una mayoría del colectivo magrebí en Crevillent, presentó ayer ante el Ayuntamiento una solicitud para realizar una manifestación de carácter pacífico. El Consistorio ha declarado que la aprobación de la convocatoria de manifestación es competencia de la subdelegación de Gobierno, no del Ayuntamiento.

Esta manifestación tiene como objetivo expresar la necesidad de la comunidad árabe del municipio de que aumenten la seguridad. Además se busca reafirmar que no todo el colectivo de inmigrantes magrebíes de Crevillent son delincuentes.

También, quieren hacer saber que muchos de los comercios árabes de la zona se ven afectados negativamente por causa de la floreciente delincuencia en la avenida de San Vicente Ferrer y en la Ronda Sur.