La conclusión del pleno monográfico incluyó algo inédito en este salón de plenos: la combinación de los abucheos de los vecinos del Ensanche con los aplausos de los trabajadores de La Estambrera. Mientras se esperaba, en completo silencio, el comienzo de la sesión, los vecinos -algunos de ellos con dilatada vinculación al PP- exhibieron una pancarta de protesta. Posteriormente, los residentes intentaron que se leyera un escrito -el alcalde se negó-, muy crítico con la actuación del PP. Afirmaban que «a día de hoy, el Ayuntamiento todavía no nos ha informado, ni a nosotros ni a los ciudadanos, con la claridad necesaria respecto al proyecto, sino que se ha limitado a ir dando una serie de respuestas vagas y de desplantes a los vecinos que se han interesado». Por la negativa a debatir el texto y por la aprobación de las propuestas de la empresa y denegación de las alegaciones, los vecinos lanzaron abucheos, que fueron seguidos de fuertes aplausos de los trabajadores de La Estambrera.