Debido al exceso de agua se me han secado cerca de un millar de almendros. Vino a verlos a la finca uno de los técnicos de campo de la Cooperativa Mañan, Juan Salvador, y dijo que se trataba de asfixia radicular. Otra persona también coincidió en el mismo diagnóstico. La última DANA del pasado mes de enero dejó cientos de campos anegados. Solo en el mes de enero se registraron 175 litros.
La asfixia radicular se produce por un déficit en la disponibilidad de oxígeno debido a un exceso de humedad en el suelo. La planta debido al aumento de las temperaturas necesita de una mayor cantidad de oxigeno en la zona radicular y este oxígeno no llega cuando el suelo está muy pesado, secando la raíz, sobre todo en suelos muy compactados.
Siguiendo los criterios del técnico hice un par de tratamientos para intentar salvarlos, pero el resultado fue infructuoso. Por dos veces los traté, pinchando directamente a la raíz con una barrena y productos vigorizantes.
Las hojas empezaron a ponerse de color amarillo hasta perderlas y secarse totalmente el árbol. El resultado: un millar de árboles muertos. Es un 10% de la producción la que se ha visto afectada. Esperemos que no vaya a más y que tengamos un invierno con lluvias moderadas.
El trabajo en el campo tiene estos contratiempos. Era mi primera cosecha. Los almendros tienen 3 años. Son aún jóvenes, pero ya tenían algo de producción. Son de la variedad vairo.
Como los agricultores somos así de osados, tengo intención de replantarlos el próximo invierno. He procedido al arranque de los árboles enfermos con una retroexcavadora y he dejado ya el agujero hecho con la intención de plantarlos de nuevo. Es bueno que durante todo este tiempo hasta que plante de nuevo se airee la tierra.
Por si no fueran todo desgracias, el precio de la almendra se ha desplomado, como consecuencia de las importaciones masivas de la almendra californiana que ha hundido los precios a nivel nacional. Este año se da la circunstancia de que California cuenta con una cosecha récord, un 18% superior a la campaña pasada, lo que dificulta aún más las cosas. La almendra cotiza en la lonja a 3 euros el kilo de grano. Solo se salva, de momento, la ecológica que se mantiene por encima de los 7 euros. Veremos hasta cuando dura la alegría.
