Las críticas del presidente del PP Pablo Casado a la actuación de España en la evacuación de ciudadanos afganos, tras la victoria de los talibanes en Afganistán se inscriben nuevamente en esa política de dañar al ejecutivo de Pedro Sánchez sea como sea y bajo cualquier excusa.
Da igual el sentido de Estado que se le presupone debería tener el primer partido de la oposición en asuntos clave como política exterior.
La situación es bastante compleja, como por desgracia demuestran los últimos acontecimientos con el brutal atentado suicida en el aeropuerto de Kabul que ha dejado 60 muertos y 140 heridos, entre ellos militares de EEUU. Afortunadamente no hay que lamentar víctimas españolas, cuyo ejército está colaborando en las labores de evacuación con más de un centenar de militares de manera ejemplar.
Se equivoca el PP tratando de sacar tajada electoral de cada desgraciado acontecimiento. Primero con la pandemia y ahora con la evacuación de ciudadanos afganos, acusando al Gobierno de actuar “tarde y mal”.
Hay asuntos de interés nacional que requieren el máximo consenso posible, empezando por el primer partido de la oposición al que no se la ha visto en este año y pico de legislatura que ya llevamos apoyar al Gobierno de la nación en ningún asunto. Tampoco ahora.
