La cantante Amaral  no ha sido noticia por su buena actuación musical  sino por haber enseñado los pechos durante una actuación en el festival Sonorama Ribera. Dice que lo ha hecho para defender la libertad de las mujeres.

La libertad de las mujeres se defiende haciendo leyes justas, desarrollando políticas de igualdad, que equiparen a hombres y mujeres en derechos y libertades.

No escuché a Amaral ni a tantas otras que como ella llaman a la “revolución” criticar la ley del sí solo es sí que ha dejado en la calle a más de un centenar de agresores sexuales y ha rebajado la condena a un millar de violadores.

España no es Irán ni Afganistán donde se pisotean los derechos de las mujeres y donde manifestarse se paga con la vida. Mujeres valientes que salen a la calle para defender sus derechos en contra de prendas como el burka o el velo que significan opresión e intolerancia.

Nadie se escandaliza en España porque una cantante enseñe los pechos durante un concierto, salvo los maeapilas que sigue habiendo, lo que llama la atención es la repercusión mediática que ha tenido.

La cantante zaragozana quiso hacer una reivindicación política y utilizó el escenario para ello. Lástima porque muchos solo querían escucharla cantar. Eso sí, ha conseguido que se hable de ella en todos los medios de comunicación. Buena campaña de marketing para un grupo en franco declive musical.