El acuerdo al que quiere llegar Pedro Sánchez con los independentistas para sacar adelante la investidura, como es una ley de amnistía debería ser refrendada por todos los españoles en unas nuevas elecciones, entre otras razones porque conceder la amnistía a los políticos catalanes condenados por el ”procés”, entre ellos, el ex presidente catalán Carles Puigdemont no figuraba en el programa electoral del PSOE ni el ideario socialista. El propio presidente Sánchez se comprometió a traer a España al fugado Puigdemont para ser juzgado.
No me atrevo a calificarlo de fraude electoral, como sí ha hecho el líder del PP Alberto Núñez Feijóo, pero sí es un engaño al electorado socialista y al resto de votantes.
La amnistía no es un tema baladí. Dudo mucho que los votantes socialistas de Extremadura, Andalucía o Castilla La Mancha, por poner unos ejemplos, vean con buenos ojos que se haga borrón y cuenta nueva contra aquellos que atentaron contra el orden constitucional, convocando un referéndum ilegal y declarando la independencia.
Ahora los españoles ya sabemos que, la amnistía no es ningún obstáculo para hacer a Sánchez presidente, como sí lo era antes de las elecciones, cuando toda la parte socialista del Gobierno, incluido su presidente, consideraban la amnistía fuera de la Constitución, lo mejor es convocar unas nuevas elecciones y que los españoles voten si están a favor o en contra de una ley de amnistía.