Ha fallecido a los 98 años de edad, el prolífico director y guionista del cine español, Mariano Ozores. En 2016 se le concedió el Goya Honorífico por su larga carrera cinematográfica con cerca de un centenar de títulos. Ozores pertenece a una saga familiar vinculada al mundo cinematográfico, junto a sus hermanos Antonio y José Luis Ozores, magníficos actores.

Sus películas muchas de ellas interpretadas por la pareja Esteso-Pajares  como protagonistas consiguieron llenar las salas de cine españolas. Títulos míticos como: “Los Bingueros”, “Yo hice a Roque III” o “El hijo del cura”. Su cine, que no gustaba a los críticos cinematográficos, pero sí al público que llenaba las salas, no pretendía otra cosa más que divertir. Era un cine popular, accesible a todo el mundo, burdo si quieren, pero rentable,  rodado en muy pocos días, con un presupuesto muy bajo que se convertía automáticamente en un éxito de taquilla.

Los diálogos de sus películas eran desternillantes. Quién no recuerda la escena de la película “Yo hice a Roque III” con Pajares de púgil subido en la báscula y Antonio Ozores traduciendo con una calculadora el paso de libras a kilos o al propio Pajares cantando “hilera” en “Los Bingueros”.

Si el objetivo de una buena película es divertir y entretener, el cine de Mariano Ozores lo conseguía con creces.

Ozores conocía como pocos directores de cine de su época, la industria cinematográfica y su oficio. Supo rodearse de buenos actores. Pepe Sacristán con quien trabajó en más de una película siempre reconoció su trabajo a las órdenes de Mariano Ozores.

Para algunos era un cine casposo y machista, sin embargo, Mariano Ozores  supo como nadie retratar la sociedad de aquel momento, siempre desde un punto de vista divertido. Gracias maestro por hacernos reír.