n Hierros Játiva es una empresa que en pocos años ha tenido que reinventarse hasta dos veces para adaptarse a las circunstancias. En 2013 resurgió de sus cenizas con motivo de la crisis inmobiliaria y ahora lucha por renovarse para superar la situación sanitaria, social y económica provocada por la Covid-19.
Es una firma de servicios integrales de carpintería metálica y cerrajería con centros de distribución en Xàtiva y Crevillent. La firma originaria comenzó su actividad en 1973 dentro del Grupo Sopena, pero tras la profunda crisis inmobiliaria tuvo que presentar concurso de acreedores y finalmente la liquidación. En 2013, los trabajadores de dos almacenes que pertenecían al grupo constituyeron la nueva empresa, como afirma el gerente Javier Antón. «Este Hierros Játiva no tiene nada que ver con el grupo anterior -que se denominaba Sopena Metales-, fuimos los trabajadores de esos dos almacenes, que además vivimos en estas poblaciones, los que en su día apostamos por este proyecto. Se llamó Hierros Játiva porque ese nombre tenía una carga histórica positiva entre nuestra clientela, al que hemos evolucionado comercialmente y actualmente como Aluminio Hierro Játiva. Seguimos teniendo actualmente, una relación muy estrecha y satisfactoria con Sopena, ya que se convirtieron en uno de nuestros principales extrusores y proveedores».
La crisis sanitaria y económica que está generando la Covid-19, como es lógico está afectando también a Aluminio Hierro Játiva, en la medida que «está impactando en nuestros clientes, claro. En el estado de alarma actual, no pueden ir a realizar instalaciones en las casas de su clientela, a menos que éstas estén vacías, a lo que hay que sumar el miedo a gastar dinero o a invertir, pues en general el consumidor en estas situaciones tiende a ahorrar y el inversor a paralizar o cambiar la inversión». Esta situación, afirma Antón, «sería de ilusos pensar que no nos va a afectar, y que estamos 'inmunizados' a las crisis, pero estoy seguro de que sabremos adaptarnos, fijarnos en lo que está sucediendo y si es necesario sabremos reconvertirnos».
El responsable de Aluminio Hierro Játiva está convencido de que su empresa podrá sortear esta crisis del coronavirus gracias a una serie de medidas como «ajustar más los plazos de entrega, que han de ser menores, dar mucho y si cabe mejor, servicio al cliente, porque ahora mismo necesitan una respuesta lo más rápida posible de su proveedor y de cumplimiento de las nuevas normativas u ofrecer nuevos productos que pueden ser una oportunidad en estos momentos».
Pese a todo, es optimista ante el futuro porque cree que la crisis que ha originado la pandemia y la consiguiente paralización de la actividad económica «es coyuntural, no estructural, generada por una situación sanitaria y que espero que pase lo antes posible o se encuentre una vacuna que resuelva el problema. Ojalá la gente pierda ese miedo que ahora tiene por el alto número de contagios y que al final se trate de una enfermedad más. Confío que cada vez afecte a menos personas y no condicione la demanda del consumidor y sus expectativas económicas y de salud», asevera Antón.
La aventura de 2013
El gerente de la empresa vuelve la vista atrás y reconoce que la etapa que comenzó en 2013 con el nacimiento de la nueva empresa fue una aventura. «En un principio asumimos que era un riesgo con un mercado ya muy saturado con una feroz competencia, pero teníamos un equipo muy competente, experiencia en el mercado y en el sector, clientes que ya nos conocían de la anterior etapa y el 'know how' del producto, sin embargo al proceder de un grupo industrial muy afectado por la crisis, nuestro margen de maniobra era bastante limitado. En esta nueva andadura todos aportamos lo que podíamos, pero no siendo suficiente hablamos con el BBVA. El banco fue nuestro pulmón y nuestro músculo financiero, nos ayudó en todo lo posible y es una de las razones por las que ahora estamos aquí, después de haber hasta triplicado ventas desde el primer año, gracias al apoyo financiero de esta entidad. Tal como decía, los trabajadores hicimos una aportación al capital social de Hierros Játiva, cada uno en la medida de sus posibilidades, pero sin el respaldo financiero del BBVA, a través de sus líneas de negociación, anticipos, etc., esto no hubiera funcionado y no hubiera sido posible». «Somos una empresa con valores familiares, pues entre todos somos una gran familia, una gran piña, en la que incluimos a nuestros clientes y colaboradores, y esto se traslada a la gestión, en la que nuestros empleados y compañeros participan y son capaces de tomar decisiones junto a la dirección. Somos un equipo en el que cada uno es experto en su área», argumenta.
Buenas experiencias con BBVA
El gerente de Aluminio Hierro Játiva afirma que se decantaron por el BBVA porque «en la anterior etapa ya trabajamos con este banco. Las experiencias siempre fueron buenas, sabíamos cómo funcionaban y, lógicamente, era un gran candidato. Por su parte, BBVA entendió que las personas que integraban el equipo estaban muy preparadas, además de profesionales serios, con muchas ganas de crear un negocio que, aunque ya existía, se iba a gestionar de una manera diferente. Ellos apostaron por nosotros y nosotros por ellos».
«Aluminio Hierro Játiva considera que, además de nuestros socios, trabajadores, clientes y proveedores, las entidades financieras forma parte de este entramado, donde las mismas tienen una importancia vital. Y BBVA por lo tanto, es un proveedor clave. En momentos de necesidad de liquidez, BBVA ha estado y está ahí, y cuando ha habido momentos de exceso de liquidez, también, ofreciéndonos productos rentables. Evidentemente este tipo de relaciones solo se conciben bajo la perspectiva del 'win to win'».
El cliente típico de Aluminio Hierro Játiva corresponde a una carpintería metálica o cerrajería de un tamaño medio-pequeño. «Hasta la fecha, nuestro mayor volumen de facturación había correspondido a carpinterías y cerrajerías metálicas de un tamaño medio o pequeño, pymes, autónomos y medianas empresas, cuya actividad principal son las reformas y pequeñas y medianas obras, pero en esta nueva apuesta y estrategia de productos, estamos creciendo también en grandes empresas y grandes obras», observa el gerente.
Antón afirma que Aluminio Hierro Játiva presentó un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) cuando se instauró el estado de alarma. «Suponía una cierta reducción de la jornada laboral, pero no lo estamos aplicando. A menos que suframos una mayor caída de la demanda no queremos ponerlo en marcha».
