De 5 millones en 2019 a 14 en la actualidad. Un incremento que evidencia el compromiso del Área de Medio Ambiente de la Diputación en la lucha contra el cambio climático. Y es que como recuerda la vicepresidenta de la Diputación y responsable del Área de Medio Ambiente, Maria Josep Amigó, «el Mediterráneo ya se calienta más rápido que el resto del planeta y por tanto, las administraciones tenemos que asumir nuestra responsabilidad y actuar aplicando medidas transformadoras».

Por primera vez, el Área de Medio Ambiente impulsa la convocatoria Reacciona para ayudar económicamente a los municipios de la provincia de Valencia en la puesta en marcha de proyectos relacionados con la energía, la movilidad, la gestión de residuos, la naturaleza y el ahorro de agua.

En primer lugar hay que reducir las emisiones. Con este objetivo se invierte un millón y medio de euros para potenciar el autoconsumo en los equipamientos municipales y así favorecer la transición hacia un modelo energético renovable, autosuficiente y local.

También se mejora la eficiencia energética destinando 155.000 euros para la elaboración de certificaciones energéticas de edificios públicos y se mantiene la subvención de 1 millón de euros para la renovación de las flotas municipales con vehículos eléctricos.

En materia de residuos, se destinan 300.000 euros para la implantación de Planes Locales de Gestión de Residuos, una herramienta de diagnosis y participación ciudadana para priorizar la reducción y lograr los objetivos fijados por el Plan Integral de Residuos autonómico.

Asimismo, se invierten 100.000 euros para la redacción de proyectos de vías ciclopeatonales, tal como indica la diputada de Movilidad Sostenible, Dolors Gimeno.

La segunda línea estratégica de Reacciona es la adaptación. Adaptarnos es asumir que el cambio climático ya está aquí y que nos tenemos que preparar para ser menos vulnerables. Por este motivo se duplica la inversión, hasta llegar a los cuatro millones de euros, en gestión y conservación de los bosques, planificación territorial, restauración y reforestación, prevención de incendios, control y eliminación de especies invasoras, protección de suelos...

Estas actuaciones generan empleo y son esenciales para mantener vivo el territorio. Además, se triplica el presupuesto respecto al año pasado para mejorar la red de abastecimiento y saneamiento con la finalidad de reducir las pérdidas de agua potable, facilitar la reutilización y minimizar los vertidos de aguas residuales a los ríos y playas. Cerca de siete millones de euros en el ciclo integral del agua.

La tercera línea estratégica de Reacciona es la educación climática mediante el programa 50/50, dotado con 160.000 euros. A través de talleres prácticos se pretende reducir el consumo energético de las escuelas con la participación de toda la comunidad educativa.