Filofobia, el posible motivo por el que no tienes pareja

El covid llegó para demostrarnos la importancia de las relaciones personales y la necesidad (tan humana) de mantener contacto con otras personas. En un mundo donde el individualismo parece crecer a pasos agigantados, el amor cobra especial relevancia al convertirse en una isla de unión entre dos personas. Pero no para todos.

Hay algunas personas que parecen huir de las relaciones de pareja en vez de anhelarlas. Son personas que se apartan de este tipo de contacto incluso cuando sólo acaba de empezar. En la gran mayoría de las ocasiones, además, ni siquiera son conscientes de su comportamiento ni del motivo que los lleva a actuar así.

Pues bien, tal vez no se trate de miedo al compromiso sino de un trastorno de ansiedad que se manifiesta mediante una fobia: la filofobia o miedo a enamorarse.

Filofobia: qué es y cómo detectarla

El término procede del griego philos (amor) y phobia (miedo) y se define literamente como el temor a enamorarse de alguien. Quien lo sufre tiene problemas para profundizar en las relaciones personales, sobre todo de pareja, y llegan incluso a autoboicotearse sin saberlo para evitar conectar sentimentalmente con otra persona.

Las personas con filofobia evitan las situaciones que las puedan encaminar hacia una relación amorosa e incluso llegan a sentir ansiedad ante la idea de mantener una relación romántica.

Asimismo, sacan permanentemente defectos a la persona con la que empiezan a sentir un acercamiento romántico e incluso boicotean esa relación para impedir que prospere (muchas veces lo hacen de modo inconsciente). Su objetivo es controlar todas sus emociones y sentimientos y no permitir que alguien pueda ocasionarle daño.

Ese es, precisamente, uno de los motivos que desencadena este trastorno de ansiedad. Habitualmente, la persona que sufre filofobia ha experimentado una situación de gran desasosiego o dolor debido a una ruptura inesperada, a relaciones anteriores de carácter tóxico o dañinas, o bien por haber vivido algún tipo de trauma durante la infancia, ya sea por crecer en un entorno de violencia o sufrir el abandono de sus progenitores (uno de los dos o ambos).

En estos casos, no es de extrañar que esas personas se valgan de un mecanismo de defensa para intentar evitar sufrir otra vez: ese mecanismo es la filofobia, que debe tratarse a nivel psicológico para poder superarla y dejar atrás este trastorno.