El barco Artic Sunrise de Greenpeace está realizando una expedición para estudiar las colonias remotas de pingüinos en la Antártida y como les está afectando el cambio climático e insta a que en el marco de la Organización de Naciones Unidas se apruebe el próximo mes de marzo un Tratado Global de los Océanos que promueva la protección del 30 por ciento de su superficie.

Los expedicionarios de la ONG están desarrollando una investigación en colonas remotas de pingüinos, algunas de las cuales nunca antes habían sido estudiadas. En el barco está un equipo de científicos de la Universidad Stony Brook de Nueva York, que evaluará los impactos de una Antártida que está sufriendo rápidas alteraciones y que afectan a esta importante especie centinela.

La última expedición de la ONG a la Antártida descubrió que las colonias de pingüinos barbijo en la isla Elefante se habían desplomado, y algunas de ellas habían disminuido en el número de individuos hasta en un 77 por ciento en los últimos 50 años.

Con motivo de la celebración del Día Mundial de la concienciación sobre el pingüino este jueves, 20 de enero, la responsable de la campaña a bordo del Artic Sunrise, Louisa Casson, destaca que los pingüinos son una de las "especies icónicas" del planeta que están resultando "muy afectados" por la crisis climática y de biodiversidad. "Regresamos al mar para investigar cómo la emergencia climática y otras presiones, como la pesca industrial, están afectando a los pingüinos en la península Antártica y en el mar de Weddell", ha explicado.

Por su parte, la responsable de Océanos de Greenpeace España, Pilar Marcos, lamenta que desde 2016 cuando se declaró el Mar de Ross como área marina protegida en la Antártidad, "no se ha avanzado en la protección de sus aguas".

"A pesar de los rápidos cambios que está sufriendo este paraíso, los gobiernos se están moviendo a un ritmo glacial. La Comisión del Océano Antártico no cumple con sus promesas. Los gobiernos deben crear nuevos santuarios oceánicos en la Antártida y acordar un Tratado Global de los Océanos histórico, en Naciones Unidas", subraya Marcos.

El próximo mes de marzo los países se reunirán en el marco de naciones unidas para acordar un nuevo Tratado Global de los Océanos, que revisará el sistema parcheado de gobernanza global con la que la biodiversidad se ha reducido "a un ritmo alarmante". Para Marcos, sería un "paso vital para proteger al menos el 30% de los océanos del mundo para 2030".