Estimada Señora: Un año más recibo la invitación del Colegio que Usted preside para participar en los actos con motivo de la celebración de la que se considera Patrona de los Médicos, "Vuestra" Señora del Perpetuo Socorro, donde se incluye una Misa en memoria de los médicos fallecidos y, un año más, le escribo manifestando mi oposición a que se conmemore esta celebración.

Le recuerdo en primer lugar, que ahora vivimos en un Estado declarado constitucionalmente aconfesional, en segundo lugar, que los organismos oficiales, entre los que se incluyen los Colegios Profesionales, deben respetar la Constitución y, en tercer lugar, que el colectivo de médicos, al igual que el resto de la sociedad española, está formado por personas con creencias y valores distintos que deben tener la misma consideración que los que profesan la religión mayoritaria.

Debido a ello, según mi criterio, la misa por los compañeros fallecidos debería omitirse o ser sustituida por un acto aconfesional o multiconfesional y el Patrón de los Médicos, en caso de ser necesario, debería ser una figura ajena a cualquier creencia. Con todos mis respetos. . Armando Azulay Tapiero. València.