El día 11 de agosto envié un paquete por Carta Certificada Internacional a Francia. Al ser viernes, el empleado de la oficina (el cual me informó y aconsejó con una atención exquisita) me indicó que el paquete no saldría hasta el lunes 14. (Debo recordar que el día 15 de Agosto, es festivo a todos los efectos). Ese fin de semana, lamentablemente, me di cuenta de que había sido víctima de una estafa por parte del receptor del paquete. Por ello, el mismo lunes 14 de agosto (1 día hábil después del envío) me personé en la oficina de correos solicitando que el paquete no saliera hacia su destino o en su defecto, que bajo ningún concepto se entregara y se devolviera a origen. Se abrió una incidencia y me dijeron que se había enviado un e-mail para paralizar el paquete.

El día 18 de agosto, volví a personarme en la oficina de correos para averiguar la situación del envío y me indicaron que el asunto estaba tramitado pero que no sabían cuándo volvería el paquete. Insistí en que eso no me preocupaba, pero lo que no quería bajo ningún concepto era que se entregara en destino.

El día 24 de agosto volví a personarme en la oficina y volvieron a decirme los mismo, que el asunto estaba tramitado pero que no sabían donde estaba paralizado el paquete. Insistí en que lo único importante era no hacer la entrega. El día 2 de septiembre regresé a la oficina a interesarme por el estado del envío, y me informaron que había sido entregado el 28 de agosto... No sabía cómo reaccionar€ ¿sería una broma? Pues sí€.fueron tan incompetentes.

El mismo día 2 de septiembre presenté una reclamación, a la cual, me han contestado: "Le comunicamos que, a pesar de los intentos por nuestra parte de interceptar el envío, finalmente fue entregado en destino el día 28/08/2017. No obstante, Correos solamente se responsabiliza de la custodia del envío desde su punto de recogida hasta su entrega en el país de destino». Con esta explicación está todo resuelto. Juan Francisco Sirera. València.