Si Dios fuera tan bueno como dicen me dejaría volver a ver un ratito a mi padre, sólo unos minutos para tomarnos un café y contarle como han crecido sus nietas, lo que están estudiando y lo guapas que están. Dejaría que mi madre volviera a recordar el primer beso, el día que se casó, o la primera vez que me tuvo en sus brazos€ Me dejaría tomarme la última cerveza con mi amigo Ben o conocer a mis dos abuelos, Pepe y Voro.

Pero supongo que Dios tiene cosas más importantes que hacer y en lo que pensar, como que no haya guerras o que no sufran los más pequeños o más débiles.