El Ayuntamiento de València está en fase de redacción de un borrador que contemple la posibilidad de permitir el acceso al transporte público de animales de compañía en trasportín. Esta posibilidad ha puesto al colectivo de pacientes afectados por diversas alergias en alerta si finalmente se llegara a hacer efectiva, puesto que algunas especies animales de compañía son foco del origen de ciertas afecciones que pueden suponer el riesgo de activar la alergia en un colectivo de pacientes que no es minoritario y esta medida entraría en colisión con el derecho a que las instituciones velen por la salud y el bienestar de los ciudadanos. Diversas son las causas para que se activen ciertos tipos de alergias y es la alergia a los perros y gatos a través del pelo una de las principales. También son diversas y de distinta gravedad las manifestaciones que en los alérgicos puede suponer exponerse al contacto con algunos alérgenos. Como ciudadano preocupado por el colectivo de alérgicos, estimo que para llegar a autorizarse la aprobación y puesta en marcha de esta medida, la decisión debe recaer en los responsables sanitarios de la Administración y no depender de cualquier otra concejalía, puesto que la puesta en marcha de esta nueva normativa, podría suponer un grave problema sanitario que tal vez no haya sido evaluado, tal como ya se está poniendo de manifiesto en estas mismas páginas del diario Levante-EMV. No he visto por parte de la Asociación Valenciana de Alergología que se haya pronunciado al respecto, y entiendo que algo tienen que aportar. Por tanto, prudencia en la decisión que se adopte finalmente puesto que la salud de las personas se encuentra por encima de otras consideraciones de tipo social.