Listeriosis, botulismo, salmonelosis, gastroenteritis, etc. Nos intoxicamos por alimentos deficientes o mal cocinados. He recordado que se dio tristemente un caso en València, de dos matrimonios, ellos eran abogados, que fallecieron los cuatro por comer ostras en mal estado, en un restaurante de alta categoría. Los bichos no respetan ni lugares ni personas. Los inspectores seguro que hacen lo que pueden, quizás se necesite cubrir más plazas, pero aun así no estamos libres de padecer cualquier intoxicación alimentaria. Hay que seguir las instrucciones de la cadena alimentaria, y al menor síntoma de que un alimento tiene manchas verdes u oscuras es mejor tirarlo que ingerirlo. Y he recordado que pasa esto último con los quesos, las frutas, los cítricos ,que no se han refrigerado convenientemente. Las carnes hacerlas bien fritas o a la plancha a muchos grados de temperatura sin quemarlas, y los pescados consumirlos frescos lo antes posible o congelarlos. Y además los científicos dicen que los pescados ingieren microplásticos y que los tomamos. Aun todo ello, no estamos exentos de sufrir cualquier atisbo de algún bicho microscópico. Extrememos las precauciones.