Estamos viviendo tiempo difíciles, los cuales nadie habría imaginado. Se ha escrito sobre miles de

epidemias y catástrofes, pero ni en las mejores novelas de ciencia ficción se podía prever

semejante desastre y esta quedara marcada en cada uno de nosotros.

Es triste, pero desde este pequeño rincón, querría recordar y agradecer a todos aquellos

transportistas que se juegan la vida cada mañana en la carretera por nosotros, pasando horas al

volante, sin un plato de comida caliente que llevarse a la boca, sin un sitio cómodo donde dormir,

porque la necesidad común es mas importante que la individual, que podamos ir a comprar y

encontrar el supermercado lleno es algo que para nosotros es lógico y natural, pero no es así, hay

gente que esta ahí trabajando día y noche para que nosotros tengamos esas comodidades,

ajenos a cualquier pandemia, dificultades meteorológicas y reloj que les indique que su jornada

ha terminado, mostrándonos su mejor cara y demostrándonos que para ganar la batalla solo

hace falta un poco de valor y ganas.

De esta saldremos, gracias a muchísima gente: sanitarios, cajeros, reponedores... pero este

GRACIAS va por vosotros transportistas, héroes sin capa pero con camión.