Mereces lo que con tus actos te ganas. Cualquiera de nosotros

elabora una reputación en consecuencia a nuestra forma de actuar.

El merecimiento es lo que debes recibir por haber realizado según que

cosas, ya sean positivas o negativas.

Solo tú eres responsable del resultado que obtendrás.

Si quieres merecer resultados positivos, deberás actuar de manera

adecuada para ello. Por lo que no te queda otra que pensar muy bien

qué es lo que vas a hacer. La consecuencia será lo que habrás

merecido.

Si quieres ser médico, debes elegir dicha carrera universitaria y, sin

duda, estudiar dedicando el tiempo oportuno para poder sacar la nota

obligatoria. Pero solo eso no bastará€

Una vez tengas dicha titulación y su correspondiente especialidad,

deberás seguir con tu formación y luchar hasta conseguir un puesto

de trabajo.

Sólo así merecerás ser médico.

Este es solo un ejemplo aplicable a cualquier ámbito en la vida.

Mereces ser respetado si tú respetas a los demás. Con esto no quiero

decir que te deban faltar al respeto, pero tampoco tienes el derecho a

exigirlo.

Mereces ser amado únicamente si tú sabes amar€

Mereces un aumento de sueldo cuando hayas demostrado tu valía en

el puesto€

«JAMÁS exijas algo que no mereces. Pero SIEMPRE que lo merezcas,

exígelo»