Querido equipo de Selegna, soy Rosi, la hija de María Teresa y la mayoría de vosotros ya me conocéis. A pesar de que han sido muchas las ocasiones que desde la familia os hemos hecho saber nuestro agradecimiento por el trato a nuestra madre, no sabía qué forma emplear para hacerlo más público y se me ocurrió que a través del periódico podría ayudar a más familias indecisas. Ya estábamos totalmente tranquilos de que el final de su vida sería ahí, con vosotros, pero tuvo que llegar el confinamiento, los positivos al virus, la distancia con ella y no saber qué podía pasar, para darnos cuenta que iba a estar en el mejor sitio. Vuestra actuación, profesionalidad, amabilidad, cercanía, implicación más allá de lo que vuestro puesto de trabajo os podría exigir a veces, os ha hecho aún más grandes. Solo quiero agradeceros de nuevo el trabajo bien hecho y daros voz para que todos los que me lean lo sepan. Si estáis indecisos ante la necesidad de tener que dejar a un familiar en algún centro, no busquéis cercanía a ellos, no busquéis grandes publicidades€ os recomendaría con el corazón Selegna. Es y seguirá siendo el hogar de nuestra madre y allí continuará recibiendo el cariño y la paz que en estos momentos necesita. Rosi Bozano. Benicàssim.
