Los seres humanos somos fra?giles, nos dan?amos con facilidad y tenemos limitaciones. Somos capaces de lo peor. Pero es curioso, porque cuanto ma?s conscientes somos de ello, ma?s crecemos.

Conocer los defectos ayuda a trabajarlos, saber las propias limitaciones facilita establecer objetivos realistas y tener en cuenta las debilidades nos permite evitar situaciones que sabemos podri?an superarnos.

La informacio?n es poder. Por eso tener tanta informacio?n de uno mismo nos hace poderosos, nos hace fuertes.

En el momento que conocemos la propia vulnerabilidad es cuando nos fortalecemos, cuando aprendemos a protegernos y prepararnos, cuando vemos que tambie?n somos capaces de lo mejor.

La fragilidad es la antesala de la fortaleza. Esa es la magia.