Los carteros hemos estado trabajando como servicio esencial desde el principio de la pandemia. Somos, después de los sanitarios, el colectivo más afectado por el virus. Sin embargo, no veo a los carteros en ningún premio o agradecimiento público. Hemos ayudado, hemos repartido comidas, hemos repartido medicinas y sobre todo hemos hablado con las personas, algunas de ellas muy solas.