?

La Generalitat Valenciana ha pagado este año con una demora de tres meses los gastos de funcionamiento de cada cuatrimestre a los institutos públicos, mientras la empresa pública del Consell Construcciones e Infraestructuras Educativas (Ciegsa), cuya deuda en 2008 se elevaba a los 2.000 millones de euros (según el informe del Síndic de Comptes), ha adjudicado sólo dos actuaciones de obra en las poblaciones de Castelló en 20 meses.

La falta de liquidez en las arcas autonómicas ha afectado a algunas áreas del departamento educativo. Sin embargo, entre éstas no se encuentras las iniciativas más polémicas impulsadas por el conseller Alejandro Font de Mora en esta legislatura. Educación mantiene su total respaldo al programa experimental para el fomento del uso del uniforme escolar en la escuela pública.

La Conselleria de Educación prevé destinar en este curso casi 40.000 euros a 12 centros de la provincia de Castelló para que sus alumnos puedan utilizar de forma voluntaria el uniforme escolar. El plan contempla 20 euros por estudiante para los colegios que participen por primera vez, y 10 euros para aquéllos que lo hacen por segunda vez.

Una cifra nada desdeñable teniendo en cuenta la actual situación de crisis económica y el endeudamiento de la Hacienda autonómica. En breve además publicará en el Diari Oficial de la Comunitat Valenciana (DOCV) la convocatoria para la incorporación voluntaria de la asignatura de chino en el sistema educativo.

La vuelta del uniforme escolar es una medida que introdujo Font de Mora hace dos años, y su consignación económica parece que no se verá mermada en las actuales circunstancias. A este respecto, la resolución de la conselleria sobre el uniforme escolar, publicada en el DOCV el pasado 11 de noviembre, contempla un total de 37.840 euros para doce colegios públicos de la provincia de Castelló (uno en Almassora, uno en Benicarló, dos en Burriana, dos en Castelló de la Plana, tres en Nules y tres en Vila-real).

Las subvenciones oscilan entre los 1.300 euros en el caso del colegio de Educación Especial la Panderola de Vila-real, a los 6.500 del CEIP Ángel Esteban de Benicarló. El programa "experimental" se conoce como "estudio de las ventajas en el ámbito educativo del uso del uniforme escolar para el curso 2009-2010".

El Ejecutivo valenciano considera que con la recuperación de la vestimenta escolar en la educación pública se da respuesta a una serie de molestias que, según la administración autonómica, surgen con la informal.

Retrasos

Y mientras los experimentos con el uniforme y escolar y con la enseñanza de chino reciben un importante respaldo económico, otros departamentos de la conselleria sí que padecen las inclemencias de la recesión. Es el caso de las nuevas intraestructuras educativas. El Consell adjudicó en diciembre nuevas obras de adecuación en los colegios públicos Pío XII de Onda y Cervantes de Vila-real. Hasta ese momento, la empresa encargada de la construcción de centros educativos (Ciegsa) llevaba cerca de 20 meses sin publicar ni una subasta de obra de la provincia de Castelló en el Diari Oficial de la Comunitat Valenciana. Los sindicatos denuncian que la mayor parte de las obras previstas en el plan educativo de 2004 (Crea Escola) están sin culminar (afiman que está pendiente el 75% del total).

En este sentido, unos 4.000 alumnos de la provincia estudian este año en unos 167 barracones, unas aulas prefabricadas que el Gobierno valenciano achaca a la construcción de nuevos centros.

Fuentes de Educación subrayaron que el ritmo de ejecución no ha descendido en los municipios de Castelló, y citaron de ejemplo las últimas actuaciones adjudicadas en diciembre.