El Defensor del Pueblo de la Comunidad Valenciana cerrará la queja de oficio que abrió para investigar la situación de un niño de 9 años que reside en un pequeño municipio de la provincia de Castelló y que pesa casi 80 kilos, al considerar que «no existe desatención por parte de los padres».
Esta decisión se adoptó tras la visita realizada ayer por la mañana por personal de la institución al municipio donde reside el menor y tras entrevistarse con familiares y compañeros del niño, así como con el alcalde del municipio y varios concejales, además de con la directora del colegio donde estudia el chico y el médico del pueblo. De estas entrevistas y de los informes recabados se ha concluido que el menor no sufre desatención por parte de sus padres, sino sedentarismo debido al peso que tiene en la actualidad, y se ha comprobado que antes de que la denuncia llegase al Defensor del Pueblo el niño había empezado una dieta «muy estricta» para perder peso y ejercitaba la natación tres veces por semana.
Entrevistas periódicas
No obstante, el Defensor del Pueblo valenciano llevará un control sobre el menor con entrevistas periódicas con el médico que lo atiende, así como con la directora del colegio con el fin de comprobar que su situación de peso mejora, según las mismas fuentes.
Un portavoz del Síndic José Cholbi aclaró que se ha decidido el archivo del caso al apreciar los técnicos que el niño ha vuelto a ponerse en manos de los médicos, que le han prescrito una dieta «muy severa». Respecto a la supuesta falta de integración del menor, el portavoz añade que «era normal, ya que cuando un niño de más de 80 kilos se pone a jugar con otros niños en el recreo se cansa enseguida porque no puede seguir el ritmo de los demás».
La dieta a la que se ha sometido está empezando a surtir efecto, y en apenas unos días ha rebajado al menos cinco kilos, hasta situarse cerca de los 75, un peso todavía demasiado elevado para un chico de su edad.
«Ahora está haciendo deporte y piscina tres veces por semana, por lo que se ha entendido que la queja debía archivarse. Además, el niño está en vías de integrarse de nuevo», añade el portavoz del Síndic.
