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El portavoz de Iniciativa per Vila-real, Alberto Ibáñez, mostró ayer la "indignación que se extiende entre el vecindario" del municipio por la negativa de la corporación municipal a bajarse el sueldo.

Según estas fuentes, el malestar de los vecinos es mayor tras ver "cómo actuan con rapidez y responsabilidad en otros ayuntamientos". En Vila-real la población "todavía no sabe qué medidas piensa tomar el Ayuntamiento para dar ejemplo en asuntos como el recorte de los sueldos o la reducción de la abusiva lista de asesores", denuncia Iniciativa.

Según Ibáñez, "igual es que tienen vergüenza y no quieren hacer caso a la propuesta de la Federación Valenciana de Municipios y Provincias (FVMP) de bajarse el sueldo un 15%, o igual es que tampoco quiere reducir la plantilla de asesores, que todavía no sabemos realmente en qué asesoran".

Según estas fuentes, "Vila-real es una de las ciudades más afectadas por el paro, el consistorio está muy endeudado. No podemos esperar a que suene la flauta, sino que hay que actuar ya porque los ciudadanos están sufriendo situaciones económicas graves mientras nuestros representantes piensan si se reducen o no el sueldo".

El portavoz ecosocialista ha remarcado que el concejal Ignasi Clausell afirmó en su día que las medidas estarían dentro del marco de la Federación Española de Municipios y Provincias, "así que exigimos que la bajada del sueldo sea de un 15% y que recorten en protocolos y promociones de forma inmediata".

"Parece ser que el Partido Popular no se ha enterado de la grave situación que estamos atravesando, en gran parte por su culpa, y continúa dilapidando el dinero público en lugar de ayudar a las miles de familias que se han quedado en paro", critica Ibáñez. El portavoz de los ecosocialistas insiste en que la situación financiera de las arcas públicas de Vila-real es muy grave y sus representantes políticos deberían tomar medidas inmediatas para evitar un desastre mayor.