La Diputación de Castelló niega que la nueva ley valenciana de Régimen Local contemple la supresión de municipios. El presidente en funciones, Francisco Martínez, afirma que el texto no habla de fusionar pequeñas localidades, sino de mancomunar sus servicios. En la provincia, según dice, no es necesario porque la Diputación está detrás para auxiliar a los ayuntamientos con menos recursos.

Como recogió este diario, la nueva ley valenciana de Régimen Local autoriza al Consell a suprimir de oficio los municipios y estimular las fusiones e incorporaciones de localidades cuando las condiciones económicas lo hagan conveniente. Este proceso está dirigido a las poblaciones inferiores a 500 habitantes, que constituyen el 45% del total de la provincia de Castelló.

El presidente en funciones de la Diputación, Francisco Martínez, interpretó que la propuesta del conseller Blasco "habla de mancomunar servicios", negando que aborde la supresión de municipios. Partiendo de esta premisa, defendió el "papel fundamental de la diputación". "Prueba de ello es la cantidad de servicios que prestamos, como la recaudación de los tributos, no sólo de ayuntamientos pequeños sino también grandes. También el abastecimiento de aguas a través de los consorcios, la cloración de agua potable, el mantenimiento de depuradoras, la recogida de residuos, o las funciones de secretaría. Tenemos convenios con arquitectos, ingenieros, aparejadores. De los 135 municipios, 110 están suscritos a estos convenios".

Qué opinión le merece entonces el plan del Consell. Para Martínez, es positivo "si es para algunas diputaciones que no tienen todo lo que he explicado". Para el caso de Castelló, a su juicio, sería redundante.