Los padres del distrito 4 de Castelló cuyos hijos se han quedado sin plaza en los colegios Gregal y Ripollés no van a cejar en su empeño, y este miércoles volverán a concentrarse ante la dirección territorial de Educación para exigir nuevas aulas en dichos centros. 50 niños de 3 años se han quedado sin plaza y la conselleria ha previsto como solución un aumento de las ratios (de 25 a 28 alumnos por clase). Los padres afectados rechazan esta medida al considerar que "va en detrimento de la enseñanza de los niños", según la portavoz del colectivo, Pilar Castillo. J.M.castelló