El equipo de gobierno en el Ayuntamiento de Benicarló confirmó ayer que la planta de transferencia de basuras prevista en el municipio sigue paralizada porque la empresa pública que ha de ejecutarla no ha pagado por la licencia de obras.

En el pleno celebrado ayer, el concejal de Medio ambiente, Antonio Cuenca, se refirió a preguntas del grupo socialista sobre la situación del proyecto. Cuenca aclaró que existe una petición para construir esta planta en Benicarló, pero las obras están "paralizadas" porque la empresa pública Vaersa, dependiente de la Generalitat, "no ha pagado las cuotas de la licencia de obras".

Por otra parte, el edil afirmó que "todavía está pendiente la celebración de una reunión con el director gerente de Vaersa para conocer los precios por tonelada".

El norte de Castelló vive una situación límite con los residuos. La construcción de la planta de tratamiento y el vertedero de Cervera, que darán servicio a los 49 municipios del consorcio, lleva años de retraso y las poblaciones se encuentran sin salida para sus basuras. El panorama se agravará próximamente con el cierre del basurero de Vilafranca, donde vierten los pueblos de Els Ports.

El consorcio sigue sin reunirse para arbitrar una solución provisional, hasta que entren en funcionamiento las instalaciones de Cervera. Los responsables de la entidad supramunicipal abogan por canalizar todos los desechos a Benicarló, donde hay prevista una planta de transferencia. Desde allí se trasladará la basura a un vertedero autorizado, aún por determinar, para su correcto tratamiento. El problema es que la planta de transferencia de Benicarló sigue sin ejecutarse por los problemas entre el ayuntamiento y Vaersa. Hasta que no se resuelva la situación, los quince municipios gobernados por el PSOE no pagarán su cuota al consorcio como medida de presión.