El alcalde de Castelló, Alberto Fabra, se comprometió ayer con el síndic de Greuges de la Comunitat Valenciana, José Cholbi, a adoptar "todas las medidas que estén a su alcance para eliminar al máximo posible la contaminación acústica existente" en la zona lúdica del Puerto de Azahar, situada en el Grau de Castelló.

La Sindicatura informó ayer en un comunicado que Fabra ha aceptado la recomendación de Cholbi que tiene como origen una denuncia presentada por una asociación de vecinos en la que se exponían las "insoportables" molestias acústicas que padecen durante la etapa estival los vecinos del paseo de Buenavista, situado junto a esa zona de ocio.

Los vecinos alegaban que las molestias eran consecuencia de los ruidos procedentes de la música, de los puestos del mercadillo y, de las terrazas de los pubs, cuyos horarios de apertura se prolongan hasta altas horas de la madrugada.

En su recomendación, el Síndic apuntaba que los ruidos inciden perniciosamente sobre el derecho fundamental a la inviolabilidad del domicilio, así como a los derechos constitucionales a la protección de la salud, a un medio ambiente adecuado y a una vivienda digna.

Asimismo, Cholbi recuerda al alcalde en su recomendación que el Estatuto de Autonomía de la Comunidad Valenciana dispone que "toda persona tiene derecho a gozar de una vida y un medio ambiente seguro, sano y ecológicamente equilibrado".

Por todo ello, el síndic ha alabado la "respuesta" y el "compromiso" del alcalde de Castelló, "como viene siendo habitual", al comunicarle su firme voluntad y obligación a "cumplir con la normativa vigente" en materia de ruidos. En su contestación, el alcalde de Castelló anuncia al Síndic que se van a realizar actuaciones de control con apertura de los expedientes sancionadores.