Castelló no es ajeno al caos que se vive en Japón. El país nipón afronta su peor tragedia desde la Segunda Guerra Mundial, con un recuento de muertos que no cesa en un ambiente donde la confusión y el miedo son la tónica general. Por si el terremoto de nueve grados en la escala Richter no fuese poco, el tsunami posterior ha teñido de negro el país nipón. Esta situación de pánico fue narrada ayer a este periódico por un joven ingeniero de Vinaròs, Isaac Borrás, que vive en Munato-Ku, una céntrica área de Tokio.

Se desconoce si lo peor ya ha pasado, teniendo en cuenta la alerta por posibles fugas nucleares declarada en dos centrales del país por los daños del seísmo. Además, se anuncian nuevas réplicas del terremoto que pueden ser muy fuertes. "La televisión nacional está anunciando que hay un 70 por ciento de posibilidades de que Tokio sufra un terremoto de magnitud siete en la escala Richter en los próximos 3 días, sólo esperamos que no se cumplan los pronósticos", indicó Borrás, quien trabaja como consultor mecánico para una empresa británica de consultoría y servicios profesionales en la capital nipona desde hace tres años.

Esta preocupación por posibles réplicas y por la grave situación que atraviesa el país son compartidas por la familia de Isaac, que espera impaciente en Vinaròs cada noticia que les llega de él. "Mi familia está algo preocupada, pero los mantengo informados", indicó el joven ingeniero.

A pesar de la gran alarma que internacional por las fugas radioactivas, en las zonas menos afectadas por el terremoto se vive un ambiente más relajado "porque se va calmando la alerta por fuga puesto que si no pudieran controlar la presión en el reactor tres el edificio del reactor ya habría volado como el número uno ayer -en referencia al sábado-".

"Ahora mismo las preocupaciones son abastecerse de comida para los próximos días, prepararse para los cortes de electricidad previstos en los próximos días y confirmar si hay trabajo o no mañana lunes, ya que muchos colegios no harán clase", afirmó ayer Isaac desde su casa en Tokio vía Internet.

Afortunadamente, el seísmo no ha provocado víctimas mortales entre la comunidad de españoles que viven en Japón, así el vila-realense Alain García Bariel, que también vive en Tokio, se encuentra en perfecto estado, como ya informó ayer este periódico.

Desde la ventana de su casa y desde las calles adyacentes, Isaac hizo unas fotografías sobre como era ayer la situación en la capital, que son las que acompañan a esta noticia.

Ambos vecinos de la provincia no tienen previsto regresar a Vinaròs y Vila-real, tras lo sucedido. De todos modos,el Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación recomendó ayer retrasar cualquier viaje "no imperativo" a Japón a raíz del fuerte terremoto registrado el pasado viernes en el noreste del país.

Recomendaciones

Se aconseja a los españoles que se encuentren en el país que sigan las recomendaciones de las autoridades locales para estos casos, extremen las precauciones tanto en sus lugares de residencia como en sus desplazamientos, especialmente en las zonas urbanas, y que se pongan en contacto con la Embajada en Tokio para cualquier duda.