Un acto tan inocente y entrañable como escribir la carta a los Reyes Magos puede suponer una amenaza a largo plazo para alcanzar la anhelada igualdad de género. Cada vez son más las voces que apuntan a la necesidad de terminar con estereotipos sexistas que se cultivan y sustentan desde la infancia. Así, resulta complicado acabar con asociaciones tradicionales como que las muñecas son para las niñas y los coches son solo asunto de niños.
Con este objetivo el Ayuntamiento de Vila-real organizó una jornada informativa para ayudar a Sus Majestades de Oriente a elegir los juguetes para estas Navidades con criterios educativos sin obedecer a otras cuestiones más relacionados con el sexo del agraciado con el regalo.
Bajo el título "L'elecció de joguines. Educa en igualtat", la psicóloga Neus Batalla explicó a los asistentes cómo elegir el mejor regalo sin caer en concepciones tradicionalistas. "Jugar tiene un gran valor pedagógico porque enseña a los niños habilidades y les ayuda a sus socialización", señaló Batalla, quien destacó que los juegos no tienen sexo, "ya que son los adultos los que se lo ponen".
La experta recordó que cuando regalas a un niño o una niña un objeto le estás trasmitiendo un mensaje, más allá del artículo material. Según Batalla, los regalos encierran en numerosas ocasiones lo que la sociedad espera de ellos, por ejemplo a una chica se le regala un muñeco para que aprenda a cuidar un bebé o a un niño se le regalan juguetes de acción con el fin de lograr una personalidad fuerte. Un sinfín de clichés, difíciles de cambiar si no van acompañados de una transformación global y social.
Juegos experimentales
Una opción para huir de los juguetes sexistas es la que ofrece el amplio catálogo de juegos didácticos y más experimentales. Y es que no hay que olvidar que aún está peor visto que un niño se divierta con una cocinita a que un niña juegue con un balón. Frases como "eso no lo hacen los niños o eso es de chicas" siguen estando en el ideario comúnmente aceptado.
Los juguetes empleados en el taller fueron donados a la Joventut Antoniana, encargada cada año en Vila-real de la organización de la Cabalgata de Reyes, para que distribuya los juguetes entre las familias vila-realenses y llevar la ilusión a todos los hogares de la ciudad.
Psicólogos, educadores y expertos recuerdan que la igualdad de género, real en el terreno legal pero aún una asignatura pendiente en la sociedad, debe inculcarse en los más pequeños desde que inician su proceso de socialización.
