El Ayuntamiento de la Vall d'Uixó tiene previsto presentar próximamente dentro de la iniciativa del Banco de Tierras una propuesta para buscar a los propietarios interesados en la unión de parcelas para la creación de un polígono agrario y turístico. Según explicó el concejal de Agricultura, Joaquín Molina, se trata de contar con "un nuevo proyecto de futuro encaminado a crear un área de cultivo común, pero también con otros recursos con el objetivo de reactivar la economía y además utilizar parcelas de las que actualmente están abandonadas".

Aunque no hay plazos ni fechas y de momento se está trabajando en un proyecto abierto, próximamente se dará cuenta del mismo en el Banco de Tierras. Según Molina la idea es acoger una superficie de unas 100 hectáreas, lo que supondría unas 1.200 hanegadas. Los propietarios son los que deben proponer terrenos y ahí se escogería la zona de actuación.

Además se constituirían en una sociedad, según el modelo legal adecuado para el proyecto cuya inversión según el edil "se amortizaría en el propio proyecto" aunque matizó que todo "está todavía en una fase incipiente".

Este proyecto de polígono agrario que se quiere formar en la Vall tendría tres ejes, uno agrícola, otro energético y un tercero turístico. En el primer uso se busca según Molina "realizar una explotación de un único producto sea citrícola o no, para comercializarlo, con lo que se buscaría eliminar lo que son los minifundios y buscar una mayor rentabilidad" con lo cual "se podrían reducir costes y extraer beneficios, al igual que fomentar la inversión, pues la finca tendría una única gerencia".

Aprovechamiento energético

El segundo eje sería el energético, pues dentro de las 1.200 hanegadas según Molina se habilitarían terrenos "para la construcción de una instalación de aprovechamiento energético de unos 100 kilowatios que funcionaría con el sistema de gasificación y así se obtendría un gas denominado syngas a través de una combustión controlada". De esta manera se obtendría la energía eléctrica, pero al mismo tiempo se generaría una energía térmica "que podría reaprovecharse dentro del propio polígono en diversas cuestiones como por ejemplo la que serviría para la climatización de unos invernaderos si se cuenta con una producción de hortalizas u otras instalaciones".

Finalmente, de las 1.200 hanegadas previstas, se calcula una reserva de 200 que servirían para el uso turístico urbano y el complemento del polígono. En este caso se trataría de aprovechar y realizar la construcción "de un camping, casas de madera para alojamiento, un club de hípica o cualquier otra actividad relacionada con el sector, pues la Vall se sitúa en un enclave magnífico, muy cerca de la playa, pero también en la puerta de la Serra d'Espadà". Joaquín Molina recordó que en breve se comunicará el proyecto a través del Banco de Tierras local y animó a todos los propietarios interesados "a que faciliten sus datos para poder contactar con ellos y remitirles una circular, así como informarles de la cuestión conforme se vaya concretando". De momento, el primer punto será contar con el listado de propietarios interesados en que sus terrenos se incluyan.