Los benicenses lograron por primera vez no pasar la noche en vela en el Polideportivo Municipal para elegir sitio para cocinar en el Día de las Paellas, el 20 de enero.

Y todo tras la iniciativa de espontánea de quienes empezaron a hacer cola a las 6 de la mañana del domingo y varios miembros de la organización, compuesta por vecinos vinculados a la fiesta. Ambos decidieron hacer unas listas en las que la gente se apuntaba a medida que llegaba al polideportivo, para no tener que guardar fila durante muchas horas y poder estar resguardados del frío. La opción fue bien vista por todos y por ello ayer sólo se formó la cola una hora antes del inicio del reparto de los tiquets.

La alcaldesa, Susana Marqués, informó de que el ayuntamiento "sólo fija el lugar y la fecha y son los vecinos y organización quines deciden cómo establecer los turnos". Éstos, para conseguir una mejor organización establecieron dos colas, una fuera del polideportivo. Así fueron entrando de 100 en 100. "Una organización estupenda", afirmaron Marqués y quienes estaban en la cola. Por la tarde se repartieron los tiquets a las 400 personas que habían conseguido número.

Marqués espera que acudan a las paellas unas 20.000 personas.